Del Goya y otros menesteres

La Casona del Parque ·
Buena representación de munícipes, pero menos de lo esperado ya que Porras, Sarabia, Barrionuevo y López se quedaron a cargo de la crisis en Campanillas. El resto, mayoría esmoquin y traje largo en una noche agridulce

Pilar R. Quirós

Málaga

Lunes, 27 de enero 2020, 01:15

La noche tendió a redonda, pero el día fue un despropósito. Aquí, en Málaga, donde el Lorenzo se pasea a placer casi todo el año, ... la tormenta Gloria ensombreció una jornada que apuntaba a ser gloriosa hasta que Campanillas se inundó. Casi nada en la vida es perfecto. Cuando Buenafuente dijo, «Qué bonita es Málaga. Tengo que volver. Pero qué clima, Málaga, qué clima», frase con la que hizo reír al auditorio, en las gradas superiores, las malaguitas, se escuchaba «el clima éste es de prestado, que conste». Pues sí, prestado y todo lo que ustedes quieran, pero eran las ocho de la tarde y llovía. Y hacía frío y humedad. El tiempo nunca se sometió al dictamen de los hombres.

La concejala de Cultura, Noelia Losada y su marido Carlos Jiménez. Ella, con diseño de la antequerana María Molina.

El montaje de la gala de los Goya fue espectacular, pero hubo un asunto que no solventaron bien en el polideportivo Martín Carpena, y el sonido fue definitivamente deficitario en el graderío superior, como comentaban ediles de todos los grupos políticos y periodistas de varios medios. Hay jornadas en las que se echa de menos que Málaga tenga un auditorio de verdad. El sábado fue una de esas.

Nicolás Sguiglia y Eduardo Zorrilla, antes de entrar al Martín Carpena.

Hubo de todo en la velada. Hasta los que no fueron. Algunos por motivos varios como ya explicamos en esta sección el martes pasado. Las ausencias de concejales iban a ser de Gema del Corral, Elisa Pérez de Siles y José del Río. Pero finalmente se sumaron otros cuantos ediles populares como Ruth Sarabia, Teresa Porras, Avelino Barrionuevo y Raúl López. Las dos primeras, recorriendo Campanillas hasta bien entrada la noche; y los dos últimos haciendo lo propio en el centro de emergencias municipal. Así que las filas populares estuvieron mermadas. El alcalde Francisco de la Torre, que acudió acompañado de su hija Lucía y fue seguido muy de cerca por la jefa de Protocolo, Pilar Alonso, apareció por los pasillos circundantes del Martín Carpena justo detrás de la marabunta que se montó para salir al finalizar la entrega de los premios. Ese momento fue realmente asfixiante y generó muchas quejas de invitados que se marcharon porque estar ahí era casi misión imposible.

Raúl López y Avelino Barrionuevo, en el centro de emergencias el sábado noche.

Los socialistas de Dani Pérez estuvieron bien juntos toda la noche al igual que los ediles de Adelante Málaga. De riguroso esmoquin los populares y socialistas, y de traje de chaqueta o americana la coalición de Izquierda Unida y Podemos. El alcalde era el único de los munícipes con traje de gala de su fondo de armario. Con una camisa de pechera blanca y botones negros. Los socialistas, de la Trajería, a 120 euros de alquiler, como ya contábamos. Las concejalas, casi todas de largo riguroso.

Sarabia y Porras, la noche de los Goya, en Campanillas.

La edil de Cultura, Noelia Losada, iba realmente favorecida con un diseño de la antequerana María Molina en una azul muy 'in' pero difícil de llevar, que sin embargo ella lució con estilo.

Emocionante el Goya de honor a Pepa Flores, el de mejor actor a Antonio Banderas y mejor actriz a Belén Cuesta, el trío de malagueños power, que fue muy comentado en los pasillos atestados de gente, y por los que pasaban paellas de fideuá equilibristas . No faltó Almodóvar triunfando en Málaga y de reconciliación plena con la Academia, temas recurrentes en una velada que, para que no se lleven a engaños, fue definitivamente agridulce. Campanillas sobrevolaba las cabezas de todos.