El Festival de las Linternas no volverá a celebrarse en el Parque del Oeste de Málaga

El Festival de las Linternas no volverá a celebrarse en el Parque del Oeste. Una vez que concluya y sea desmontado, el evento basado en la popular celebración del Año Nuevo chino no volverá a montarse en esta zona de la Carretera de Cádiz.

Fuentes municipales han confirmado que los organizadores del festival, Ximénez Iluminación y Lantern Group, van a renunciar al proyecto porque no están del todo satisfechos con el número de visitas y los resultados económicos que están obteniendo. Tampoco lo están en el Consistorio tras las numerosas protestas vecinales que se han producido desde antes de la inauguración. Tanto es así que el alcalde, Francisco de la Torre, ha llegado a asegurar que la instalación en aquella zona de la ciudad no contó con el suficiente consenso vecinal.

Aunque el anuncio oficial no se producirá hasta que concluya el evento el próximo 15 de febrero, la decisión parece estar tomada por las dos partes. Mientras tanto, desde la empresa cordobesa Ximénez se emplazan a fechas posteriores: «El Festival de las Linternas aún no ha finalizado. Estamos en permanente comunicación con nuestro socio chino Lantern Group, con quien, llegado el momento se hará una valoración», apuntan.

El Festival de las Linternas se anunció como un evento exclusivo que iba a colocar el nombre de Málaga un poco alto a nivel mundial. De hecho, incluso se anunció durante una visita del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, a China. La idea es que el evento ejerciera un efecto llamada hacia los barrios y que vinieran visitantes de toda la región, pero la realidad es que pronto se topó con el frontal rechazo de los vecinos por ocupar casi la mitad del espacio de un parque público para realizar una actividad privada.

Desde su inauguración, a finales del pasado mes de noviembre, el Ayuntamiento ha defendido a capa y espada el proyecto asegurando que el resto del parque permanecía abierto y que los malagueños podían acudir a pasear o correr, pero sin duda, la presión vecinal ha sido más fuerte que la resistencia municipal.

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