Secciones
Servicios
Destacamos
«Invitamos a la prensa y al Alcalde, en lugar de la Policía». Con esta llamativa declaración de intenciones, y en pleno tira y afloja sobre la ocupación del edificio, La Invisible ha estrenado este sábado una exposición sobre su proyecto de rehabilitación con la ... presencia del director del Van Abbemuseum de Holanda como símbolo de resistencia y de apoyo internacional.
La muestra titulada 'La Rehabilitación de la Casa Invisible - Capítulo 1' consiste en una exposición multidisciplinar donde se muestran los ejes fundamentales del proyecto arquitectónico a través vídeos, esculturas, dibujos, trabajos textiles, impresiones y prototipos constructivos a escala real. Lo singular de la exposición es que no se celebra en el patio, como es habitual, sino en el interior del edificio del siglo XIX ubicado entre las calles Nosquera y Andrés Pérez.
La exposición forma parte del proyecto de Arte Útil desarrollado por los artistas Libia Castro y Ólafur Ólaffssen, y durante la inauguración han contado con la presencia de Charles Esche, comisario, escritor y director del museo Van Abbemuseum de Holanda, una de las instituciones internacionales que ha expresado su apoyo al colectivo.
Puntual a la cita, las puertas de La Invisible han abierto a las 18.30 horas y en pocos minutos se ha llenado de visitantes y curiosos que han tomado el patio. La visita se realiza de forma guiada y en grupos reducidos de un máximo de 40 personas y tienen una duración máxima de una hora. Comienza en la primera planta, donde se proyectan algunas de las acciones que se han desarrollado durante los últimos dos años en defensa de este espacio cultural alternativo y termina con algunas pinceladas sobre los cursos y talleres que se realizan en el edificio.
Según sus propios organizadores, se trata de un proyecto que conjuga arte, arquitectura, activismo, derecho y sostenibilidad para plantear una reflexión y defender el presente y el futuro de la casa, el derecho a la ciudad y a los espacios de acción social, «así como el valor de la cultura local frente a los procesos de mercantilización y turistificación que avanzan consumiendo el Centro Histórico de Málaga como de muchas otras ciudades». También es una excusa para que los malagueños conozcan por dentro el edificio y sepan para lo que se utiliza. Podrá visitarse todos los sábados y domingos hasta el próximo 21 de enero de 18.30 a 21.30 horas (salvo los fines de semana de Navidad y Reyes).
Respecto al proyecto de rehabilitación del que hablan en la muestra, recuerdan que fue redactado y coordinado en el año 2016 por el arquitecto José Manuel López Osorio en colaboración con la Invisible y a petición del Ayuntamiento para proceder a la concesión del inmueble. Sin embargo, «hasta la fecha no ha podido ser ejecutado a pesar de haber sido valorado positivamente por la Gerencia de Urbanismo».
De hecho, entre los documentos que se exponen en la primera planta se encuentra el protocolo de intenciones para el impulso del proyecto cultural que firmaron todas las administraciones en el año 2011 y que ha quedado en agua de borrajas a tenor de los sucesos posteriores.
La inauguración de la exposición se produce en un nuevo momento de tensión con el Ayuntamiento de Málaga, que el pasado miércoles les advirtió tras incumplir de forma reiterada los decretos de cierre de actividad. Desde el Consistorio adelantaron que si no cumplen con el decreto de cierre (como así ha ocurrido este sábado) recurrirán a la vía penal. «Como no son titulares del edificio no pueden pedir una licencia de apertura o una declaración responsable», aseguraba la concejala Elisa Pérez de Siles.
A pesar de ello, el futuro de La Invisible sigue sin estar del todo claro. Pese a ser de propiedad municipal, el pasado mes de mayo el juez denegó por segunda vez la autorización para desalojar el edificio ocupado desde hace 16 años por colectivos socio-culturales que sentían que no tenían espacio en los circuitos oficiales.
A expensas de que llegue dicha resolución, el Ayuntamiento está a punto de adjudicar la redacción del proyecto de rehabilitación del edificio, de 1.800 metros cuadrados. Según los planes del propio alcalde, la única opción de que La Invisible siga allí pasa porque el inmueble se divida en al menos tres partes para que pueda ser utilizado por diferentes colectivos. Pero los responsables de La Invisible ya han advertido: «Seguiremos pese al hostigamiento».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
A la venta los vuelos de Santander a Ibiza, que aumentan este verano
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.