Juan Cassá, hoy sentado, entre los ediles populares en el pleno de Málaga. SAlvador salas

Las explicaciones del alcalde a Cassá fructifican y éste se suma de nuevo al PP y a Cs en el pleno de Málaga

Rechazo a una consulta popular para el plan Litoral, condena a la represión al pueblo cubano, con los votos en contra del PSOE y Adelante, y demanda de una mejor financiación del Gobierno

Jueves, 29 de julio 2021, 14:32

No lo querían decir muy alto antes de entrar en el pleno, como explicaba uno de ellos, porque con (Juan) Cassá nunca se sabe. Pero lo cierto es que el PP llegaba con los deberes hechos con el edil independiente y se sentaban tranquilos en el salón, donde parte de la oposición ya sabía también que no sería una sesión con sobresaltos por los vaivenes y desmarques del asturiano, que tan bien se lo hizo pasar en las comisiones de Urbanismo, Economía y Derechos Sociales votando a su favor. Lo cierto es que en las iniciativas de peso, las urgentes, el independiente se ha puesto de nuevo al servicio del PP (que no de Cs, con quien no tiene ninguna relación) y ha votado a favor con el equipo de gobierno y en contra de la oposición, tal y como hacían los ediles de la bancada de la derecha (con los que se sienta). Así pues parece que las explicaciones que el alcalde Francisco de la Torre y la fluidez en las comunicaciones que decía había que poner en marcha con el exnaranja han dado sus frutos. El asturiano no ha dejado mal al regidor, que ayer hablaba de su confianza en la «gran lealtad» que tenía con ellos.

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Lo cierto es que la iniciativa que tenía más calado local, la que presentaba Adelante Málaga para que hubiera una consulta popular sobre el Plan Málaga Litoral, se ha quedado a medias y no ha salido adelante justamente este punto, que era el más deseado por la portavoz de la coalición de Podemos e IU, Paqui Macías, quien ha desarrollado un debate "bilateral" con el alcalde, como él mismo ha definido, para ver si podían llegar acuerdos en los dos últimos puntos, como así ha sido, para aumentar siquiera la comunicación con los ciudadanos con un proceso de participación y en el Consejo Social de la ciudad, grupos políticos y agentes vecinales y económicos sobre el proyecto (que quiere fusionar pretende la plaza de la Marina y el Parque con el puerto, soterrando el tráfico en el eje litoral, desde la avenida de Manuel Agustín Heredia hasta el paseo marítimo Pablo Ruiz Picasso y para ello crear dos nuevas estaciones subterráneas bajo la Marina y la explanada de la Estación).

En este proyecto de ciudada, en el que el equipo de gobierno, junto a Cassá, han votado en contra de la consulta popular, el asturiano se ha lanzado a intervenir para argumentar su posición, lo que viene siendo una rara avis. Aquí, ha dicho que el plan era una "palanca para el desarrollo" mientras que Podemos (no ha dicho Adelante, ni Unidas Podemos) "sólo propone políticas de gasto". En este punto, De la Torre, le ha afeado a Macías que nadie de su grupo asistiera a la reunión a la que le habían citado desde el equipo de gobierno para explicarle el proyecto a cuenta de que querían participación, y ésta dijo que ya antes se lo había explicado a la prensa y que ese día tenían problemas de agenda. "Podría haber ido (a al reunión) uno de los tres concejales", le volvió a espetar el alcalde. La única vez durante la sesión en la que el independiente ha sacado los pies del tiesto para votar de forma diferente al PP y Cs ha sido con una iniciativa del PSOE en la que se le reclamaba a la Junta transferencias directas a los ayuntamientos para paliar los efectos del Covid en la economía así como un mayor esfuerzo inversor en materia de sanidad, que no salía adelante por el voto de calidad de De la Torre al producirse un empate técnico.

Un duro debate sobre Cuba

Aunque el Ayuntamiento de Málaga no tiene competencias en política exterior no es la primera vez que en esta cámara municipal se tratan asuntos internacionales, que han llevado todos los partidos que tienen actualmente representación. Las iniciativas que más pasión levantó entre los munícipes fueron las dos que presentaron el PP y Ciudadanos, la popular más combativa para condenar la represión al pueblo cubano y darle su apoyo, y la de Ciudadanos, relativa a las libertades fundamentales de la ciudadanía cubana, que acabaron con la votación en contra el PSOE y Adelante Málaga, partido que ya ayer comentó que no la apoyaría ya que en Cuba no se vive una dictadura, como puntualizó Remedios Ramos. Para empezar el debate intervino Maribel Reyes, cubana residente en Málaga, que hizo una alocución muy sentida por su pueblo, y dijo que debíamos entender lo que padecen porque España había sufrido una larga dictadura en carne propia. "Somos los hijos, hermanos, madres, esposos, que sufren las consecuencias de una dictadura cruel y totalitaria", dijo para pasar a explicar que el 11 de julio se lanzaron a las calles hartos de vivir así para gritar libertad. En esta iniciativa hubo un lamentable cruce de difuntos entre las dos bancadas, ya que la popular Ruth Sarabia le echó en cara a la edil de Adelante, Remedios Ramos, que no se podían llenar la boca queriendo siempre hablar de la dictadura franquista, de sacar a la gente de las tumbas, y no querer abordar, sin embargo, "la dictadura en Cuba, ya que cuando hay un partido único no hay democracia". En las filas socialistas saltó Begoña Medina para afear la intervención de Sarabia, indicando que el bisabuelo de Mariano Ruiz Araujo está enterrado en una fosa común, a lo que Sarabia le dijo que el popular Luis Verde también tiene un abuelo enterrado por la contienda. Pero más allá del debate franquista, la portavoz naranja le espetó a la bancada de la izquierda que el problema que tenían es que las dictaduras de derecha sí las veían como dictaduras, lo que no hacían con las de izquierda. "Dictaduras son todas, de derechas y de izquierdas", puntualizó. Finalmente, el pleno condenó la represión en Cuba y la violencia del régimen así una transición pacífica a la democracia, que tanto Adelante como el PSOE votaron en contra. Los socialistas se escudaron en que se trataba de un posicionamiento en contra del Gobierno de España y su política exterior.

Financiación del Gobierno y de la Junta

El pleno entró en los derroteros de la financiación tanto del Gobierno como de la Junta, con una buena noticia, que incorporó el portavoz socialista, Dani Pérez, en su intervención, y le hizo, "responsablemente", como él mismo dijo, anular el primer punto de su moción para que la Junta se hiciera cargo del desfase en las cuentas de la PIE que exigen que el Ayuntamiento de Málaga deba devolver 39 millones de euros al Gobierno porque se inflaron las cuentas de 2020. La ministra Montero desarmó este debate, porque se ha comprometido, como dijo Pérez, a transferir hasta 22.000 millones en 2022 para los ayuntamientos, un 13% más, "un récord histórico". No obstante, Pérez siguió pidiendo que la Junta invierta su supéravit en Málaga llamándole al alcalde "municipalista de pegatina" porque se había quedado afónico, sumiso y silente con Moreno Bonilla. El popular Carlos Conde se alegró de la nueva noticia, pero le afeó a la bancada de enfrente que en 15 meses de pandemia no haya llegado ni un duro del Gobierno de España aún. Finalmente, las peticiones económicas del PSOE a la Junta salían rechazadas, y las del PP al Gobierno obtenían el voto favorable para que se condone la deuda generada por la liquidación de la PIE.

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Conseguía también el PP sacar adelante su segunda iniciativa urgente para que el Gobierno revise sus alegaciones sobre la mejora en el enlace de la AP-46 con la MA-20, con el objetivo de conectar mejor las barriadas de Teatinos y Miraflores de los Ángeles con la vías de del norte de la ciudad, que contó con los votos en contra del PSOE porque Ruiz Araujo subrayó que no eran cuestiones en las que el Gobierno fuera competente, que es el que ejecuta el citado enlace, pero que sin embargo, contó con la abstención de Adelante Málaga, que hizo varias enmiendas para pedirle al Gobierno que volviera a estudiar las alegaciones del Ayuntamiento de Málaga.

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