Entorno Plaza de la Merced: la zona cero de las obras en Málaga

El polvo en suspensión, la luz blanquecina y las costillas de hormigón le otorgan un aspecto fantasmagórico al túnel. Hasta el restaurante griego de la esquina con Alcazabilla se ha sumado al carro de las reformas. Es la zona cero de las obras en Málaga. En ella confluyen proyectos públicos y privados que suman una inversión de 25 millones de euros, que serían más del doble si contamos las compras de suelo y los planes futuros. Algunas actuaciones se quedaron a medio camino. O eso parece. El asfalto en el tramo final de Álamos hacia la Merced está parcheado de otras obras recién finalizadas. La acera que circunda el viejo Astoria se renovó dos veces en un año.

La estampa termina por desordenarse sobre la acera, con una colección de motos arracimadas cerca de una de las entradas al aparcamiento. Hasta finales del año que viene no quedará despejada la zona y quizás entonces sea momento de iniciar el edificio cultural en el Astoria y, más difícilmente, la renovación de la calle Victoria. Con los plazos y las obras nunca se sabe.

En teoría el fin de las obras en el túnel está señalado para marzo de este año. Los cortes nocturnos de domingo a jueves se han prorrogado hasta el 21 de febrero de entrada. Ahora mismo sólo hay operativos dos carriles, uno en cada sentido de la circulación. El cambio será más drástico a partir de la madrugada del lunes al martes y hasta final de mes: sólo podrán circular vehículos en sentido Torrijos. El impacto en las líneas de la EMT también es grande y serán reubicadas en la calle Pedro de Quejana cuando vayan de vuelta hacia la Victoria. Están afectadas las líneas 1 (Parque del Sur-Alameda Principal-San Andrés), 36 (avenida de Andalucía-Conde Ureña), 37 (avenida de Andalucía-Altamira-Monte Dorado), Circular 2 y Nocturno 2.

Se están ultimando los trabajos en la acera Norte y han comenzado en la Sur. Paso cerrado a los peatones, que deben dar la vuelta por Alcazabilla o cruzar por Mundo Nuevo y el monte. Las aceras se han recrecido aunque menos de lo que se podría pensar porque las grandes costillas de hormigón que soportarán las mamparas de vidrio le roban un buen puñado de centímetros al ancho ganado.

Las obras tienen un presupuesto de 2,6 millones y son desarrolladas por Sando-Conacón. Cuando terminen sólo habrá un carril de tráfico en sentido Parque y se habrá rebajado considerablemente el ruido del túnel. Hasta el asfaltado es fonoabsorbente. Habrá también videovigilancia y nueva ventilación.

Hace unos días comenzaron los trabajos previos por parte de Actüa y Sardesa. La inversión asciende a 3,29 millones y se espera que el nuevo inmueble esté acabado en la primavera del año que viene. Implica la ampliación del Albéniz y una gran sede para el Festival de Cine. Además, supondrá regenerar las traseras de Alcazabilla y de Pozo del Rey.

El nuevo edificio tendrá una altura de baja más tres para permitir la visión de la Alcazaba e integrará los restos arqueológicos de la muralla y la barbacana medieval. Tendrá espacios exteriores en las que s podrá disfrutar de proyecciones y dos nuevas salas de cine. Si todo marcha, el Festival de Cine 2025 tendrá esta nueva sede.

Sando es la encargada de levantar el proyecto de hotel de cinco estrellas para Meliá en cuya operación está presente la empresa del exfutbolista Gerard Piqué (sociedad Kerard EB). En estos días han arrancado los trabajos de cimentación mientras la medianera con el edificio contiguo todavía tatúa la silueta del cine Andalucía. Tuberías azules de gran calibre quedan suspendidas y entroncan con la pared de unos bloques en Mundo Nuevo.

Será un edificio de planta baja más entreplanta, cinco plantas más y ático, que alcanzará una altura de más de 35 metros. La inversión supera los 20 millones de euros. La obra ha estado condicionada por la realización de amplias excavaciones arqueológicas para sacar a la luz enterramientos de la necrópolis medieval islámica de Yabal Faruh, que se extendía por toda la ladera de Gibralfaro.

En concreto, por su categoría, el hotel debería contar con 64 plazas. Sin embargo, únicamente va a poder disponer de 17 en una entreplanta, para no afectar a los restos encontrados, entre los que ha aparecido un panteón y una mezquita funeraria.

Según los plazos, debería estar terminado en verano de 2025. El establecimiento, de la marca ME by Meliá, tendrá ocho suites, 15 suites-junior y 105 habitaciones dobles. Se prevé una ocupación total de 290 clientes en un edificio que dispondrá de salas de reuniones, gimnasio, una piscina en el ático, bar y restaurante.

Es la obra de menor entidad de todas. La desarrolla, al igual que el resto de las públicas, el Ayuntamiento. Son 750.000 euros y las desarrolla Elecnor. Estarán terminadas antes del verano y suponen en suma renovar la señalización, pintura, saneamiento, sistemas de iluminación, circuito de televisión, etc. No se prevé ensanchar las plazas, como sí ocurrió en la Plaza de la Marina.

El Ayuntamiento invirtió en 2010 más de 21 millones de euros en hacerse con los suelos de los antiguos cines Astoria y Victoria. Por medio, ríos de tinta, los proyectos fallidos de Banderas y otro gastronómico y mucha polémica sobre si dejar o no abierta la Plaza de la Merced. La piqueta terminó con el inmueble en 2019 y desde entonces, tras los trabajos arqueológicos, se ha convocado un concurso para diseñar el proyecto del futuro edificio. Concurren más de una veintena de despachos de arquitectura para un contrato de 290.000 euros.

La voluntad municipal es construir un edificio cultural polivalente que sirva de desahogo al Teatro Cervantes y que esté muy especializado en la danza. Tendrá una altura similar a la de las Casas de Campos y deberá integrar los restos arqueológicos musulmanes y de la Reconquista hallados, entre otros.

Por su parte, la renovación de la calle Victoria no tiene aún trámites. Los vecinos esperan a ser convocados por Urbanismo para esta esperada operación en la que se buscará aumentar las aceras. Pero el condicionante de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT) es grande: es un trayecto irrenunciable para los autobuses, así que habrá que mantener una calzada central de dos carriles aunque se reduzca el tráfico.