Ecisa construirá el hotel de la torre del Puerto de Málaga

Ecisa tiene previsto crear en breve una oficina en Málaga, desde la que impulsará este y otros proyectos en la provincia, en colaboración con el estudio del arquitecto José Seguí, autor del diseño. De momento, ya han comenzado los contactos para empezar a definir cómo se ejecutará la obra, que es compleja por múltiples razones, pero especialmente por la necesidad de ejecutar un profundo subterráneo al mismo nivel del mar, con muros pantalla, para el aparcamiento y la cimentación de la torre, por lo que tendrá un plazo no inferior a los dos años.

Por otra parte, ya se ha seleccionado a tres potenciales operadores hoteleros internacionales, especializados en la gestión de establecimientos de cinco estrellas con un número extenso de habitaciones (este tendrá unas 350). Ahora están elaborando sus respectivos proyectos para definir cómo deberían ser las habitaciones, el auditorio y la zona comercial. En este caso, las fuentes prefieren no revelar cuáles son hasta que haya un ganador, para no generar agravios.

«En Catar están muy ilusionados con este proyecto, no han vacilado ni un momento», confirma el abogado Ramón Calderón, representante del fondo Al Alfia (vinculado a la familia real del emirato) en España. Según sus cálculos, es posible que este mismo mes de julio se produzca la aprobación provisional por parte del Ayuntamiento, y en octubre llegará la definitiva. Posteriormente, habrá que recoger las sugerencias y modificaciones a las que se obligue a los promotores, pues, como ya adelantó SUR (ver la edición del 15 de enero de 2020), el trámite urbanístico obligará a cambiar aspectos del diseño, especialmente por la imposición de un retranqueo de unos 40 metros frente a las alineaciones iniciales, por lo que la torre será moderadamente más baja que los 135 metros previstos inicialmente. Una vez rematado el nuevo diseño se presentará públicamente, con la presencia tanto de representes del fondo catarí como de la cadena hotelera seleccionada.

Calderón no pierde de vista que la iniciativa requiere también el visto bueno del Consejo de Ministros, y espera encontrar «facilidades» en Madrid. No en vano, han sido casi cinco años de tramitación, un millar de alegaciones y el visto bueno del Ayuntamiento y el Puerto. «No creo que con la que está cayendo ningún Gobierno sea tan insensato de tumbar un proyecto que supondrá una inversión de 150 millones, que generará muchos puestos de trabajo y que cuenta con las bendiciones de la ciudad».