¿Quién está detrás de las denuncias de Dani Pérez en los juzgados?

Pero en el grupo socialista del Ayuntamiento de Málaga, el abogado es más de la casa de toda la vida. Tan de la casa, que anteriormente fue edil (mandato 2015-2019). Se trata del que fuera portavoz del PSOE en la Diputación por ser concejal en Málaga así como parlamentario andaluz en su última época, Paco Conejo, que en sus años de su trabajo como político se dedicó a terminar la carrera de Derecho en la Universidad Oberta de Cataluña y ahora ejerce como letrado colegiado en el despacho de Gaona, Palacios y Rozados Abogados, en el que figura como especialista del área Administrativa y en el que se indica que es asesor del PSOE en la provincia de Málaga. También se da cuenta de su máster Abogacía por la Universidad Europea de Madrid (UEM). Así que para los descreídos, los que piensan que no hay vida más allá de la política, Conejo podría ser un buen ejemplo. Bueno, para ser precisos, sigue en la senda política, pero en otros menesteres más allá de tener cargos en las administraciones públicas.

El estar bregado siendo inquisitorial con los equipos de gobierno del PP tanto en la Diputación como en el Ayuntamiento de Málaga se ve que ha sido un plus para llevar diligentemente estos casos, en el que en uno de ellos, concretamente, se le ve tenaz y consistente en los interrogatorios, en las imágenes a las que ha podido acceder este periódico.

Conejo, que fue el todopoderoso secretario de Organización del PSOE, tiene fama de ser meticuloso. Intenso, como dicen de él irónicamente sus compañeros. De ahí que advirtiera, según los socialistas, modificaciones en los informes periciales sobre las obras del aparcamiento de Pío Baroja, en Echeverría del Palo. Una cuestión, de la que el portavoz socialista, Dani Pérez, afirmó en el último pleno lo siguiente: «Hemos constatado 23 modificaciones en los dos informes periciales (arquitecto e ingeniero) para ajustar las certificaciones a los sobrecostes», en un asunto, el del caso Smassa, que siguen muy de cerca. Conejo se ha reciclado, y ha vuelto. Bueno, siempre estuvo ahí.