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En el PP nadie quiere deshojar la margarita hasta que el alcalde Francisco de la Torre diga de nuevo que, superando todos los pronósticos, y buscando emular a Fraga Iribarne y a Giorgio Napolitano, dos de los políticos más longevos de Europa, quiere volver a ... ser candidato a la Alcaldía. Tras 21 años con la vara de mando a sus espaldas, hoy por hoy sigue siendo imbatible. Decía un dirigente socialista, ahora venido a menos tras la derrota susanista, que De la Torre era un autómata. Se refería a que parece que ni siente, ni padece, no se sulfura, que las cosas no le afectan y no tiene apenas vida personal más allá de los muros de la Casona. En fin, que era un imposible candidato a batir.
De la Torre aún no lo ha dicho, pero es cierto que sus más directos colaboradores le ven en esa tesitura: la de repetir. Tantos años y no le queda ni un delfín a estribor; hoy por hoy buscar el llamado mirlo blanco sería una tarea harto complicada. No parece haber nadie en la recámara. Y los que siempre habían querido están en otros menesteres o casi defenestrados.
En el otro lado del ring está el portavoz socialista, Dani Pérez, triunfante tras la victoria de su candidato a las primarias del PSOE en Andalucía, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas.
Primarias duras por lo que le supuso de decantarse al que suelen llamar 'bienqueda' en los pasillos de la Casona por esa habilidad suya de no generarse enemigos y mantener la cordialidad y la diplomacia, aunque durante las sesiones plenarias sea duro con la bancada de enfrente. Lo cortés no quita lo valiente, frase que gusta de usar. Si este año no le quedó otra que fajarse al apoyar al sevillano en las primarias regionales, el que viene, finales de 2022, se tendrá que presentar a las suyas propias para seguir siendo el cabeza de cartel en las municipales de 2023. «Mi aspiración se demuestra día a día, y es ser alcalde de Málaga», puntualiza.
Tras el proceso, Pérez indica: «Ahora toca actuar con generosidad y mirar al futuro, y no queda más que un liderazgo, que es el de Juan Espadas«, indica dejando claro que la mano está tendida, pero que hay cosas que no se pueden discutir. ¿Está en juego la secretaría provincial del PSOE en Málaga?¿Se postula? «No se ha hablado nada de eso. Si se hubiera hecho sería una temeridad. Lo que sí está claro es que soy una persona de referencia y hombre fuerte de Juan«, indica al mismo tiempo que subraya que su responsabilidad es Málaga y que su sitio está aquí. Obviamente estas declaraciones no son incompatibles con ser secretario provincial, que durante la campaña parecía descartar.
Estos días, tras la ola socialista, los ediles estaban en el grupo y tocaba hacer algo de reflexión tras el proceso. Si es verdad que en el Ayuntamiento han guardado las formas respecto a sus querencias, espadistas y susanistas, también queda meridianamente claro que ocho estaban con el ganador y cuatro con la perdedora.
En esta jornada charlan animadamente en la oficina central los que se decantaron por la trianera, Pablo Orellana y Rosa del Mar Rodríguez, y los espadistas Begoña Medina, Mariano Ruiz Araujo y Lorena Doña.
En una reflexión post-electoral, el argumento es similar en ambos lados. Orellana, ufano, rompe el hielo. «Mira, en mi agrupación, un militante me dijo con mucha pena que iba a votar a Espadas, y yo le contesté que cada uno podía elegir. Con estas primarias, se ha demostrado que el PSOE está muy vivo, que debatimos y votamos a nuestros líderes«, puntualiza.
«Dicen que Espadas es un hombre moderado, tranquilo, que quiere conciliar, que no le gusta la guerra abierta. A ver si es verdad y huye de los conflictos«, indica Rosa del Mar Rodríguez. Para Lorena Doña, lo importante es que los socialistas tienen la suerte de militar en un partido con bases democráticas y que pueden elegir a sus líderes en primarias. Ella, Mariano Ruiz Araujo y Begoña Medina ven muchas similitudes en el talante del alcalde sevillano y el portavoz socialista. «Espadas tiene un perfil similar al del Dani Pérez. Son los dos munícipes, Espadas es alcalde, y estamos convencidos de que nuestro portavoz lo será dentro de dos años».
«Los dos tienen perfiles de liderazgo (Espadas y Pérez), cercanos a la ciudadanía, saben lo que hay en su entorno. La actitud de diálogo y consenso del PSOE en el Ayuntamiento se ha visto con el apoyo a los presupuestos y a la Expo 2027«, explica Medina. Ruiz Araujo, que está de acuerdo, habla además para finalizar del espíritu concilador, y subraya que el PSOE tiene que hacer ahora un trabajo de cirujano y coser, acercar un lado y el otro. Consenso, talante, coser, liderazgos, alcaldías, aspiraciones. Muchas palabras cargadas de significado tras las el trance de las primarias socialistas.
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