El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga y secretario provincial del PSOE, Dani Pérez, explicaba esta mañana la abstención «responsable» socialista en la Diputación para que el ente supramunicipal no tuviera que depender del edil no adscrito, el exnaranja Juan Cassá, ni de Juan Carlos Maldonado (última baja en Cs, aunque aún vicepresidente de la Diputación) y se despachaba con la siguiente bomba de mano: «Señor Cassá, estoy convencido de que los cheques que cobra usted no son en blanco», que subrayó durante la aprobación de los presupuestos 2022 en el Ayuntamiento de Málaga.
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El grupo popular en el Ayuntamiento de Málaga, con el que el no adscrito tiene firmado un pacto de estabilidad, hizo caso omiso a estas declaraciones, que el exnaranja contestó de la siguiente forma: «Señor Pérez, ¿usted acusa al alcalde de Málaga de pagarme con un cheque?, ¿acaso acusa al PP de pagarme a mí con cheques?», le preguntaba al tiempo que subrayaba que la abstención (practicada por el PSOE en las cuentas 2021 en el Ayuntamiento y este año en las de 2022 en la Diputación) «no es apoyo, es sólo por quedar bien, es una actitud cortoplacista y cobarde». Por último le decía a Pérez que sentía impotencia porque él (Cassá) era el que hablaba e influía y aportaba en el avance de la ciudad.
El rifirrafe seguía en la siguiente intervención de Pérez, en la que le espetaba a Cassá que a ver si es verdad que iba a Génova (sede del PP, tal y como informó que iba a hacer este periódico). «A ver si es verdad que el viaje es de ida y no de vuelta».
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