Cuenta atrás para la construcción de 400 adosados entre El Candado y La Araña

Detrás de esta operación urbanística está la actual empresa propietaria de la fábrica de cementos de La Araña, Votoratim, que, según ha podido conocer SUR, trabaja ya en la elaboración de los proyectos de urbanización y reparcelación, encargados al estudio del arquitecto local Ángel Asenjo. Está previsto que estos dos documentos sean presentados ante la Gerencia Municipal de Urbanismo en un corto plazo de tiempo. Una vez que ambos sean aprobados por el Ayuntamiento, podrán dar comienzo las obras para la transformación de estos suelos.

En ellos se produjo hace 25 años un corrimiento de tierras que obligó a las 29 familias de la urbanización Montegolf, al norte de El Candado, a abandonar sus viviendas precipitadamente. Este suceso derivó en el derribo de tres de estas casas, que no pudieron mantenerse en pie. Otras dos, que quedaron deterioradas, se encuentran todavía desocupadas, y el resto siguen habitadas, aunque marcadas por aquel fenómeno que se atribuyó a la inestabilidad del terreno en esa zona del este de la capital.

Estos vecinos siguen esperando la promesa que les hizo el Ayuntamiento en el año 2003 de que pondría en marcha la maquinaria urbanística para facilitarles 29 nuevas casas a las que poder mudarse. Estas viviendas se construirán en el borde sur del proyecto residencial de La Platera, cuya ordenación se ha adaptado en los últimos años para evitar espacios concretos que, por sus condiciones naturales, son menos seguros a la hora de llevar a cabo la cimentación de las construcciones previstas.

La nueva ordenación reduce de 534 a 406 las casas previstas, y la superficie media de las viviendas sube de 89 metros cuadrados a 116, como se pedía desde la Gerencia de Urbanismo. Así, según la documentación que se ha tramitado, en la mitad oeste del sector, se levantarán 215 viviendas adosadas distribuidas en tres manzanas; equipamientos educativo, social y deportivo; y las 29 viviendas unifamiliares aisladas para los vecinos de Montegolf (en el proyecto se reservan espacios para 30 casas en total). Por otro lado, en la parte este del ámbito, separada de la fábrica de cemento por el trazado de un arroyo, irán 161 adosados en dos manzanas y una zona comercial.

Los vecinos de Montegolf mantienen un acuerdo con la promotora malagueña Suba, sociedad perteneciente al holding Sinerba, para que les construya las 29 casas de la parte sur de esta actuación urbanística, la más próxima a la antigua carretera N-340, a cambio de que esta empresa pueda disponer de suelo en este sector, facilitado por el Consistorio, para un proyecto residencial que será «de tipo tipologia unifamiliar y con un diseño y equipamiento a la altura de la privilegiada localización de los terrenos», según han apuntado desde la promotora. Además, Suba asumiría la demolición de las casas que se vieron afectadas por el corrimiento de tierras en el año 2000 para dar paso a una zona verde.

Antes de la construcción de las viviendas y su cimentación deberá cumplirse el condicionante impuesto por la Junta de que un técnico competente deberá verificar 'in situ' las condiciones del terreno para adoptar «todas las medidas preventivas» previstas en los estudios ya realizados y las que, de manera adicional, considere ese profesional.