El entorno del Santuario de la Victoria continúa afectado por los cortes de gas. SUR

Los cortes de gas persisten en viviendas y negocios del Centro, aunque el suministro se va recuperando poco a poco

La empresa suministradora admite la envergadura del problema y desconoce cuánto tiempo tardará en restablecer por completo el servicio

Lunes, 18 de marzo 2024, 13:00

Una avería en la red de gas este pasado fin de semana mantiene aún este lunes sin suministro a numerosas viviendas y negocios del Centro, aunque muchos de ellos recuperaron la normalidad el domingo después de horas (en algunos casos de un día entero) sin servicio.

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Desde la empresa suministradora, Naturgy, admiten que la avería ha sido grande y que aún hay «bastantes» clientes afectados, pero que siguen trabajando para restablecer la normalidad lo antes posible en las zonas afectadas desde el sábado pasado: entorno del Santuario de la Victoria, Lagunillas, Ferrándiz, Plaza de la Merced, zona de la Catedral y calles tan comerciales como Larios, Granada y Alcazabilla. Algunos restaurantes de estas ubicaciones, como el Pimpi y D`Platos sufrieron cortes durante horas en un fin de semana con gran afluencia de clientes, aunque no se vieron obligados a cerrar.

En la empresa desconocen cuánto tiempo les llevará arreglar los daños ocasionados en la red y, por el momento, no se atreven a dar un plazo. No obstante, fuentes consultadas por este periódico aseguran que serán días. Algunos usuarios han mostrado su malestar por la falta de información: «Ni siquiera han avisado a las comunidades con la colocación de algún cartel o escrito en la entrada de los inmuebles», expresa una usuaria perjudicada desde el sábado.

La avería, que ha afectado desde entonces a unos 500 clientes entre particulares y negocios del Centro, ha obligado a movilizar a hasta 40 técnicos de toda Andalucía para localizar una incidencia que tuvo su origen «en la entrada de agua en un conducto de gas, que produjo una filtración en la red general», aseguró una fuente de Naturgy.

Esto fue consecuencia de una «intervención humana», que a la larga ha resultado fatal. El detonante del problema fue el cambio de un calentador en un domicilio particular próximo al mercado de La Merced cuando se conectó erróneamente la toma de gas en la de agua, lo que obligó a la empresa a interrumpir el suministro por seguridad.

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