Correos será al fin un hotel de lujo para Málaga: estas son las claves que desbloquean el proyecto

Finalmente, el Consistorio ha aceptado la última de las vías jurídicas planteadas por la propiedad de Correos, asesorada por la consultora Ejecución del Planeamiento, para que la transformación del edificio en hotel pueda llevarse a cabo por una de las figuras contempladas en la actual Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA). En concreto, se tramitará como una actuación de mejora urbana, desarrollada por un estudio de ordenación.

No obstante, el principal punto de fricción respecto a esta operación residía en que la propiedad de Correos pedía un incremento de la superficie construida del edificio para que pueda alcanzar unas 200 habitaciones amplias, requisito que la propiedad considera clave para que puedan interesarse por operar el hotel cadenas internacionales de primer nivel como Mandarín, Ritz Carlton o Four Seasons. Para ello, los representantes de Tsuff propusieron incrementar la actual superficie construida del edificio en unos 4.000 metros cuadrados más que se materializarían en una ampliación de la planta baja para servicios y en el recrecimiento del basamento hacia la avenida de la Aurora hasta alcanzar una altura de planta baja más cinco.

Sin embargo, ese planteamiento se topó con el rechazo de los técnicos de Urbanismo, que argumentaron que el edificio de Correos, inaugurado en 1986, suma 14.335 metros cuadrados de techo que superan con creces lo que podría construirse actualmente en ese espacio del Centro, por lo que podría admitirse que se mantenga como está pero no que se amplíe con un nuevo cuerpo hacia la avenida de la Aurora.

Finalmente, según ha podido conocer SUR, la propiedad de Correos y los responsables de Urbanismo, encabezados por la concejala Carmen Casero y el coordinador José María Morente, han alcanzado un acuerdo que hará posible encajar un aumento de la edificabilidad del edificio, pero de forma interna, sin que se vea alterada su actual envolvente.

Desde el Ayuntamiento han destacado que «la Gerencia de Urbanismo y la propiedad del inmueble de Correos han alcanzado un acuerdo sobre las líneas básicas de la propuesta de cambio de uso del antiguo edificio de Correos situado en el centro de nuestra ciudad para asignarle uso hotelero». «Ello permitirá poner en valor el inmueble existente emblemático e icónico y en el que está prevista la implantación de un hotel de cinco estrellas de categoría especial», han subrayado.

Otro de los aspectos que ha quedado resuelto es el relativo a las parcelas que el propietario de Correos adquirió para que se califiquen como equipamiento privado para la ciudad, de forma que compensen ese uso que se pierde en el edificio que pasa a ser hotel. Estos suelos, ubicados en El Candado y la Granja Suárez, de 6.500 y 9.400 metros cuadrados respectivamente, han sido finalmente validados por Urbanismo, pese a que se trata de terrenos con obras de urbanización pendientes, una condición que invalidaría su uso como fincas compensatorias. Y es que la propiedad de Correos está dispuesta a aceptar que el hotel no recibirá la licencia de primera ocupación hasta que no estén terminadas las obras de urbanización que requieren esos dos terrenos.

Sobre una de esas parcelas, la situada en la zona de El Candado, pesa un litigio iniciado por el Colegio Platero al considerar que le pertenece una parte de ese suelo. Con todo, los técnicos de Urbanismo entienden que esa circunstancia no obstaculiza que pueda emplearse como finca compensatoria por la pérdida del uso de equipamiento en Correos.

Asimismo, el Ayuntamiento ha aceptado que dentro del propio inmueble se entregue un local a la ciudad para cubrir la compensación que por ley debe efectuar el promotor en una actuación de transformación urbanística como la que se pretende tramitar a partir de ahora.

Según las fuentes consultadas, Urbanismo espera recibir en las próximas semanas la documentación pactada con la propiedad de Correos para que pueda empezar a tramitarse el expediente acordado, que probablemente tendrá una duración de más de un año. Una vez que se apruebe el cambio de uso del edificio, de equipamiento a hotel, podrá cursarse la licencia de obras para un proyecto que todavía depende del acuerdo que cierre Tsuff con la cadena hotelera que lo desarrolle finalmente.