Construirán viviendas en el jardín junto al edificio que albergó la Fundación Manuel Alcantara

Al igual que sucediera en el caso de Villa Fernanda, en El Limonar, el PGOU otorga derechos edificatorios en un ámbito ajardinado que cuenta con protección. No obstante, lo que los privados (familia Van Dulken) plantean en este caso es concentrar la edificabilidad de los terrenos en la zona más próxima a lo que fue sede de la Fundación Manuel Alcántara, suprimiendo para ello varias de las construcciones que la rodean –algunas de ellas en desuso–, así como árboles que estudios técnicos encargados por estos particulares consideran de escaso valor y en mal estado. Además, se mantiene la protección para el jardín que rodea a la primitiva casona, una salvaguarda que se extiende hacia otra zona en ladera que hasta ahora carecía de ella, y se lleva a cabo la catalogación del edificio que acogió a la Fundación Manuel Alcántara, con protección arquitectónica de grado dos.

La Junta de Andalucía ya avaló a nivel ambiental esta actuación, asesorada por el despacho de abogados expertos en urbanismo Ius Urbis, y también hizo lo mismo el servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento. Este departamento municipal emitió un informe en el que aprobó la desprotección de parte del jardín, lo que avala la realización del proyecto residencial, así como el mantenimiento de algunas especies arbóreas que en cualquier caso no afectan a su desarrollo, como es el caso de algunas palmeras y pinos. «El jardín de La Torrecilla donde se concentra el techo constructivo (...) no es reseñable ni histórica ni botánicamente, salvo las especies resaltadas anteriormente, y, por tanto, puede considerarse la supresión de la protección del mismo por parte del Ayuntamiento de Málaga», concluía el informe de Parques y Jardines.