Comienza el derribo de la antigua fábrica de Salyt para dar paso a un nuevo proyecto en Málaga

Francisco Jiménez

Málaga

Jueves, 30 de marzo 2023, 19:39

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La antigua fábrica de ladrillos de Salyt de Málaga, cerrada a cal y canto desde marzo de 2011, empieza a desvanecerse para dar paso a un nuevo parque comercial. Una semana después de recibir la autorización de la Gerencia Municipal de Urbanismo, la propiedad ha iniciado los trabajos de demolición de las naves que desde Carlinda y durante casi siete décadas abastecieron de tejas y ladrillos a buena parte de las construcciones que se iban levantando en la provincia. La empresa Sociedad Anónima de Ladrillos y Tejas inició su actividad en 1945 junto a un yacimiento arcilloso de la Granja Suárez, cerca del arroyo del Cuarto, pero no sobrevivió al estallido de la burbuja inmobiliaria y en 2009 se apagaron los hornos. Durante un tiempo siguió la actividad para darle salida al 'stock', hasta que en marzo de 2011 echó el cierre definitivo.

Aunque los trabajos de desmontaje ya arrancaron a finales del año pasado con la retirada de la cubierta (al estar compuesta por placas de uralita ha sido necesario tomar precauciones que ralentizan la tarea), ahora es cuando se está procediendo al derribo de los muros interiores de la vieja fábrica. Sobre el terreno, todavía quedan por delante algo más de tres meses para que desaparezca la huella industrial de esta parcela situada junto a la avenida de Valle-Inclán.

Más lentos son los trámites administrativos que tiene por delante la promotora del parque comercial, la inmobiliaria Edifissa, para modificar el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de la capital para cambiar a comercial el actual uso productivo o industrial de esta parcela de 52.391 metros cuadrados. Para agilizar los plazos, esta actuación ha sido incluida en la Unidad Aceleradora de Proyectos constituida por la Junta de Andalucía para desburocratizar iniciativas que muevan grandes inversiones y generen empleo. En este caso, el nuevo espacio comercial esetá valorado en 35 millones de euros y se prevé que permita la creación de unos 350 puestos de trabajo.

Ampliar

¿Cómo será el futuro parque comercial? La propuesta contempla en la mitad oeste de la parcela un edificio de casi 10.000 metros cuadrados construidos en planta baja para albergar una cadena de bricolaje, que estará dotado con 190 plazas de aparcamiento en sótano y 242 en superficie. En su conjunto, el espacio sumará 918 plazas (351 en exterior y 478 en los sótanos de cada uno de los edificios). Además, se incluyen otros tres inmuebles para distintos usos comerciales como restaurante, supermercado, gimnasio o zonas de ocio. En principio, también se había previsto un hotel de cinco plantas, aunque finalmente quedó descartado y no figura en el convenio suscrito con el Ayuntamiento que sirve de base para la transformación de estos terrenos.

En virtud de este acuerdo, al Consistorio le corresponden dos parcelas en la esquina más próxima al barrio de Carlinda. Una, de 3.383 metros cuadrados para uso comercial que previsiblemente será subastada, y otras de 814 metros que se destinará a la construcción de un equipamiento de interés público y social, aún por concretar.

De forma paralela, la operación también conlleva la creación de una zona ajardinada de 7.334 metros que, a modo de cinturón verde, corone el centro comercial por el norte conectando peatonalmente con Carlinda y Granja Suárez mediante senderos y rampas. Por último, la actuación incluye una mejora sustancial de los accesos. Así, se plantean nuevos enlaces de entrada y salida en la avenida de Valle Inclán para favorecer la conexión desde el centro en dirección oeste y también la incorporación de los vehículos que procedan del falso túnel de Carlos Haya, para lo que se ejecutarán dos rotondas, una de ellas situada bajo Valle Inclán. Además, se mejorará la permeabilidad de Carlinda con esta avenida mediante la prolongación de la calle Galeno con un nuevo vial de un carril por sentido que bordeará el centro comercial por el este.

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