Comercios con mucho arte en Fuente Olletas

Como el de esta empresaria, medio centenar de locales comerciales de Fuente Olletas lucen desde esta semana un color especial en forma de pintada callejera con el sello del artista local Javier Dolera. Y todo gracias a la iniciativa 'Color en el barrio' puesta en marcha por la Asociación Victoriana de Capuchinos y La Fuente. «Nos puede ayudar a atraer a nuevos clientes», apuntan los comerciantes.

La intervención surgió en la cabeza de José Ocón, presidente del colectivo, tras la lluvia de barro del pasado mes de marzo. «Queríamos hacer algo para limpiar las correderas manchadas y surgió la posibilidad de pintarlas», explica. Por mediación del área de Comercio contactaron con el grafitero, que no dudó en participar. Una vez finalizada la actuación, Ocón confiesa que han quedado todos muy satisfechos. «También es una forma de darle color al barrio y de ayudar a los comerciantes que lo han pasado muy mal durante la pandemia», añade.

Juan Martín, propietario de la cafetería Juan y Concha, es otro de los comerciantes que también ha cedido la persiana de su negocio. En su caso han decorado el cierre con una luminosa farola malagueña que llama la atención de todas las personas que pasan por la calle cuando el bar está cerrado. «Mucha gente nos habla ahora de las correderas y de la imagen que le da al barrio», apunta.

El artista encargado de pintar las persianas, Javier Dolera, recuerda que la actuación comenzó el pasado verano y acaba de terminar. El diseño ha sido consensuado con los propios comerciantes, aunque muchos le han dado libertad creativa. «Los comerciantes lo han agradecido mucho y se han volcado limpiando las persianas y preparándolas antes de la intervención», confiesa el grafitero. «Es también una forma de evitar pintadas», añade.

La intervención artística ha causado sensación en el barrio. Hasta el punto de que algunos incluso se han dado de alta en la asociación por dicha actividad. Es el caso de José Luis Camacho, propietario del taller vidriero de su mismo nombre, en la calle Manrique. «Estamos muy contentos con el resultado porque se han dibujado algunos de los trabajos que hemos realizado en el taller».

Sobre la reciente entrada en la asociación, reconoce que lo hizo en cuanto conoció la existencia de la iniciativa. «Me ha sorprendido porque es una asociación muy activa que siempre está pendiente de las cosas que ocurren en el barrio».

La iniciativa se ha podido desarrollar gracias a la concesión de una subvención municipal valorada en 7.250 euros. Desde el Consistorio detallaron cuando se puso en marcha el proyecto que se enmarca en las acciones de apoyo al comercio de barrio que lleva a cabo el Ayuntamiento desde hace años y que persigue mejorar la imagen de los negocios, hacer publicidad de ellos cuando están cerrados y aumentar su visibilidad, lo que supondrá incentivar las compras.