Con mascarillas, aplicándose el gel hidroalcohólico situado en la entrada de cada tienda y procurando guardar la distancia social. Sin olvidarse de la pandemia y también sin registran las típicas aglomeraciones propias de estas fechas, los malagueños sí que están dedicando el puente festivo a echarse a la calle y cumplir con las compras navideñas aprovechando que las tiendas abren tanto hoy como mañana. A falta de escapadas de fin de semana por las restricciones a la movilidad que impiden salir del municipio, los paseos por el Centro y las grandes superficies se han convertido en la principal atracción durante una mañana en la que el frío también ha estado presente y que también ha dejado un leve chaparrón al mediodía. Aunque con más ambiente en la calle que en el interior de las tiendas, el trasiego ha sido continuo por la calles del casco histórico y también por el Paseo del Parque, que ha estado muy concurrido tanto por los tradicionales puestos navideños como, sobre todo, por el Gran Mercado Sabor a Málaga que hasta mañana ocupa todo el lateral sur y la plaza de la Marina con una amplia variedad de productos de la provincia.
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Aunque no todo han sido compras. Muchos también se han pasado por el Ayuntamiento para visitar el belén municipal y otros, en cambio, han optado por acercarse a los museos como el Pompidou, el Thyssen o la Casa Natal, que también han abierto sus puertas. Un movimiento que también se ha dejado notar en una resentida hostelería.
Debido a que los comercios, al igual que los bares y restaurantes, están obligados a cerrar a las 18.00 horas, la mayoría de las compras se están concentrando por la mañana. Desde primera hora, El Corte Inglés o Larios Centro han sido testigos de un continuo ir y venir de clientes dispuestos a ir liquidando los encargos de Papa Noel y los Reyes Magos. Como suele ser habitual, los departamentos de perfumería, textil y tecnología son los que más actividad registran. Y si ambiente había en los establecimientos del Centro, también en el Muelle Uno, donde la habitual oferta comercial se ve complementada con un mercadillo navideño. Y también en Plaza Mayor y en grandes almacenes como Ikea o Leroy Merlin mostrando una estampa que recuerda, aunque de lejos, a esa vieja normalidad que se respiraba por estas fechas antes de que la pandemia lo sacudiera todo.
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