Ciudadanos asegura que cumplirá el pacto de gobierno y que De la Torre es libre de hablar con Cassá

Los caminos de la política son casi inescrutables. Si el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, afirmaba en una entrevista a este periódico que no tendría ninguna objeción en que Juan Cassá entrara en el equipo de gobierno« y que «debería ser entendido de forma correcta por Ciudadanos como partido», ayer mismo la portavoz naranja en la Casona, Noelia Losada, explicaba su posición a SUR sobre esta cuestión no poniendo impedimentos a su socio de gobierno. Primero, Losada hizo hincapié en que como partido ya habían pedido el acta a Cassá en base a la carta ética que habían firmado todos en Cs. De hecho, esperaba que su excompañero de filas la entregara, algo que no se materializó, mientras que sí lo hizo el escrito que envió el exnaranja en el Ayuntamiento haciendo constar su paso a ser concejal no adscrito.

Una vez que esto no ha pasado, como esperaban, Losada coincide con De la Torre que lo más importante es la estabilidad de Málaga en estos momentos. «Nosotros seguimos manteniendo el compromiso de gobernabilidad con Paco de la Torre y con el PP, más aún en el contexto de crisis máxima con el Covid-19; nuestra obligación por Málaga es trabajar duro para mejorar la vida de los malagueños en esta época tan dura que nos ha tocado vivir». Tras hacer este prólogo, y al entender que la estabilidad es esencial en el Ayuntamiento, Losada subrayó que no se interpondrán en ningún acuerdo al que quieran llegar De la Torre y el PP con Juan Cassá, inclusive si supone su entrada en el equipo de gobierno.

Losada también explicó que, por supuesto, cualquier partido es libre de jugar sus bazas para gobernar. «Nosotros no podemos meternos ahí», subrayó.

El alcalde lo explicaba muy bien en la entrevista a SUR, en la que abundaba que ofrecerle a Cassá un puesto en el equipo de gobierno tendría «un gran valor porque supondría la estabilidad», al tiempo que subrayaba que siempre había trabajado por la estabilidad desde el año 2015, elecciones en las que el PP se quedó en minoría en el Ayuntamiento por primera vez en 20 años y consiguieron gobernar gracias a los votos de los naranjas. Ya entonces les ofreció entrar a formar parte del gobierno municipal, como reiteró en varias ocasiones, ya que de esta forma entendía el alcalde que al ser parte del equipo que toma las decisiones se producen menos distorsiones a la hora del voto.

De hecho, no fueron pocas las ocasiones que los ediles de Ciudadanos votaron en contra de las propuestas del PP en la anterior legislatura cuando Cassá era portavoz en la Casona. Aunque bien es cierto que solían hacerlo en cuestiones que no eran ejecutivas del pleno, y por tanto, que no tenían excesiva trascendencia, a excepción del último año 2019, en el que bloquearon el presupuesto hasta que no hubo elecciones en mayo y se negociaron posteriormente con la actual portavoz, Noelia Losada.

Ante esta crisis de gobierno que ha provocado Cassá al dejar a De la Torre en minoría, el portavoz socialista, Dani Pérez, da por fin hoy una rueda de prensa para romper su silencio sobre la posibilidad de una moción de censura aprovechando la nueva situación del edil no adscrito: Cassá es el número 16 de 31 concejales, la mayoría absoluta. De tener amarrado algún acuerdo con el asturiano, lo que sí está claro es que Pérez aún no habría negociado en esta línea con Adelante, necesarios en un vuelco en el gobierno de la ciudad, ya que sumarían sus 3 ediles a los 12+1 del PSOE y Cassá. «No tenemos ningún acuerdo para una moción de censura», decía ayer sin ambages el portavoz de Adelante, Eduardo Zorrilla, que no obstante añadía que tienen muy buenas relaciones con el PSOE y específicamente con el actual portavoz, con el que suele tratar los asuntos relacionados con el Ayuntamiento.