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La guardería Nuestra Señora de la Paz, en la barriada del mismo nombre, cerrará sus puertas el próximo miércoles 1 de marzo, dejando a en la calle a 109 niños y a 14 trabajadoras.
Las familias recibían este miércoles una circular por parte de la dirección de este grupo empresarial, Arunda Kid's, con seis escuelas infantiles repartidas por Málaga, Cádiz y Jaén, en la que se les informaba los padres de la decisión: el cierrre de la guardería en 15 días; esto es, a partir del 1 de marzo.
Alega la empresa que tiene que cerrar debido a la alta subida de los costes salariales, de los suministros generales y la no actualización del precio de las plazas escolares por parte de la Junta de Andalucía. «Después de tanto tiempo atendiendo, educando y acompañando a tantas familias en esta etapa de 0 a 3 años, nos ha costado mucho tomar esta decisión», señalan.
Esta escuela infantil tiene escolarizados a 109 pequeños, de 0 a 3 años. Está conveniada con la Junta de Andalucía, por lo que el coste de la plaza escolar está subvencionado, en función de la renta familiar.
La dirección del centro ha aconsejado a las familias el cambio del centro, que deben solicitar en un documento que se les ha hecho llegar. También aportan un listado de centros, tanto de la zona como fuera del área, con relación de plazas libres.
Una de las trabajadoras del centro, Mercedes Ocaña, enlace sindical de CCOO además, señalaba a SUR que el pasado lunes les comunicaron la intención de llevar a cabo un ERE y que les daban un plazo de siete días para formar la comisión negociadora. Sin embargo, apenas 48 horas después de ese aviso desde el centro informaban a las familias del inminente cierre, alegando razones económicas. Desde la plantilla recelan que este sea el verdadero motivo para echar la persiana, e insisten en que las 14 trabajadoras llevan realizando un esfuerzo económico muy importante, especialmente desde diciembre de 2021.
Además, desde que se ha conocido el cierre del centro educativo, la dirección ha recibido, según Ocaña, «numerosas ofertas de interesados (entre ellos, otras guarderías) en comprar el edificio con las trabajadoras subrrogadas. El teléfono lleva sonando toda la mañana sin parar», destaca. «Si la razón para el cierre fuera económica, ya tienen cómo solucionarla».
A la puerta de la guardería, este jueves por la mañana madres y padres mostraban su indignación ante la decisión tomada por la empresa. «¿Cómo se puede cerrar una escuela a mitad de curso?», es la pregunta recurrente de algunas de las madres que se han acercado a dejar a sus hijos. Otro padre cuestionaba la legalidad de esta medida, pues al estar conveniada con la Junta «su cierre antes del fin del curso escolar supone el incumplimiento del contrato que el propio centro firma en su concierto con la Junta de Andalucía», explica Manuel. «No se puede informar de una decisión así con una carta que nos llega en la mochila de los niños», se queja Antonio, con una niña de 26 meses escolarizada.
Celia, una madre que tiene a su hija de 3 años en la guardería, señala que las familias han pagado matrícula y adelantado los materiales de dos meses, que no les van a servir en las nuevas guarderías. «Las que he visto no tienen el mismo proyecto educativo. Además, a los niños les cuesta un tiempo adaparse y, ahora que ya estaban cómodos en esta guardería, tendrán que empezar de nuevo». Según los padres, Arunda tenía alquilado el edificio, hasta que el año pasado lo adquirió. «No pueden alegar falta de dinero cuando acaban de realizar una inversión tan importante para comprar un edificio», alegan las familias.
Antonio tampoco da credibilidad a la justificación del precio de las plazas escolares: «La Junta paga a todas el mismo precio por la plaza escolar, no se entiende así que esta sea la única que tenga problemas económicos», dice.
Entre sus instalaciones, cuenta con doce aulas y sus aseos correspondientes, comedor y sala de usos múltiples y dos patios exteriores. El centro es de los más grandes y el que cuenta con más niños de los seis que tiene la empresa. «Hace 15 días han abierto un aula nueva, por la demanda de niños», explica una madre. Aunque tiene mucha más capacidad, pues hay espacios cerrados.
Para los padres es un trastorno ponerse a buscar guardería a mitad de curso. «Las que nos ofrecen están muy lejos, en la zona del Guadalhorce, Litoral, etc., y con dos o tres plazas», dicen. Además, en algunos casos, como el de Celia, eligen esta guardería porque tienen a hermanos mayores en el colegio Rosario Moreno, que está justo al lado. «Rompen de un día para otro el ritmo de vida de 109 familias y 14 trabajadoras», apostilla en esta línea Mercedes Ocaña.
Además de los niños que se tienen que buscar otra guardería, el cierre deja en la calle a 14 trabajadoras. Según explican las empleadas, este lunes les comunicaron que la empresa ha presentado un Expediente de Regulación de Empleo y ha planteado una mesa negociadora. Han puesto estos hechos en conocimiento de los sindicatos para que les asesoren. Aseguran que la empresa no les ofrece otra alternativa que el paro, aunque cuenta con otras cinco escuelas infantiles, dos en la capital, una en Fuengirola, una en Algeciras y otra en Jaén.
UGT Servicios Públicos Málaga ha denunciado la situación de las trabajadoras y ha puesto estos hechos en conocimiento de la Delegación Territorial de Educación con el fin de paralizar este cierre. Asegura el sindicato que desde el año 2015, apenas un año después de asumir Gestdes Arunda la titularidad de los centros, la empresa comenzó a realizar recortes en los salarios de las trabajadoras, incumpliendo con sus derechos y condiciones laborales reguladas en normativa.
«En estos años se han venido empeorando las condiciones, tanto de las trabajadoras como de los propios centros, adquiridos por la empresa por más de 3 millones de euros, tras argumentar a las trabajadoras que no aplicaba las tablas salariales y los SMI por falta de solvencia económica», denuncia UGT, que asegura que los numerosos intentos de negociación que han mantenido con la empresa «han sido una tomadura de pelo para justificarse ante los procedimientos legales que tenían como finalidad toda esta situación: el desmantelamiento de la escuela infantil a coste cero». Al mismo tiempo, indica que la empresa se salta los plazos que determina la normativa para realizar un ERE y «juega con el miedo y la incertidumbre de los padres y madres para desmantelar el centro a base de bajas en las matriculaciones».
El delegado de Desarrollo Educativo en Málaga, Miguel Briones, ha asegurado que se están tomando todas las medidas posibles para tratar de paliar una situación generada de una manera «totalmente injusta» por el titular de este centro, adoptando la decisión unilateral de suspender la actividad en un momento crítico, en pleno periodo lectivo». Briones ha afirmado que es una decisión «injusta, repentina e imprevista», y recrimina a la empresa que no lo haya anunciado con más tiempo para «haber adoptado medidas que hubieran mitigado el impacto y perjuicio a las familias», a las que se ofrece colaboración para escolarizas a sus hijos. Asegura que le parece «una falta de responsabilidad absoluta y una insensatez» por parte de la empresa este cierre.
Además, indica que desde la Agencia Andaluza de Educación, APAE (encargada de adjudicar y gestionar las ayudas económicas a los centros de infantil adheridos al convenio con la Junta) se está al corriente de los pagos con este centro y anuncia que se están estudiando las posibles responsabilidades económicas y jurídicas por este incumplimiento unilateral del contrato.
Las trabajadoras de Nuestra Señora de la Paz agradecen las muestras de apoyo recibidas y convocan una manifestación este viernes a las 17 horas en la puerta del centro (calle Manuel de Falla 5) para protestar por la situación.
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