Cientos de personas donan sus vehículos a afectados por la DANA: entre ellos, dos malagueños

Antonio Contreras

Málaga

Lunes, 25 de noviembre 2024, 14:11 | Actualizado 19:12h.

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Semanas después del paso de la DANA por Valencia, la comunidad comienza a hacer recuento de los estragos bajo el barro. Entre ellos, miles de familias que han perdido su medio de transporte habitual. Las fuertes corrientes, el barro y las inundaciones han dejado inservibles, según el Consorcio de Compensación de Seguros, una cifra que ronda los 109.000 vehículos. Ante esta situación, han surgido iniciativas como Solidaridad Sobre Ruedas, una iniciativa cien por cien benéfica que pretende ayudar a restaurar la movilidad en la población afectada por la DANA a través de la donación de vehículos a aquellas familias que más lo necesiten. Por el momento cuentan con 469 vehículos en proceso de asignación y 103 ya entregados.

Entre los cientos de donantes se encuentran Lidia Pérez y Florencio Arias, dos vecinos de El Perchel que no dudaron en donar uno de sus vehículos a la causa. Un Toyota Corolla con algunos años, «pero en muy buen estado». «La idea nos surge apenas dos días después de comenzar el desastre. Recuerdo estar viendo las noticias con mi mujer y mis hijos cuando lo tuve claro. Mi mujer no titubeó un segundo y me apoyó desde el primer minuto», comenta Arias, quien reconoce que los primeros días «no eran el momento oportuno para esta clase de donaciones».

Aprovecharon este tiempo para bucear por internet hasta toparse con Solidaridad Sobre Ruedas, quien les brindó la confianza suficiente para donar el vehículo y tener la certeza de que llegaría a una familia que realmente lo necesitase.

La iniciativa, desarrollada por un grupo de empresarios en apenas semana y media, cuenta con el apoyo de auténticas leyendas del motorsport español como embajadores de la propuesta: Fernando Alonso, Carlos Sainz padre e hijo, Pedro Martínez de la Rosa, Jorge Martínez Aspar, Alex Palou, Marc Gené, Nani Roma, Dani Sordo, Fabio Quartararo, Nerea Martí, Roberto Merhi, Cristina Gutiérrez, Luis Moya, Dani Juncadella, Andy Soucek, Antonio García, Luis Climent, Marta García Y Pepe Martí.

Actualmente el número de vehículos donados, entre coches y motos, rozan el medio millar. Sin embargo, el número de solicitudes por parte de los afectados de la Dana ya alcanza las 7582. Si estás interesado en donar tu coche el proceso es sencillo. En la web de solidaridadsobreruedas.com encontraremos un enlace que nos redirigirá a un chat de WhatsApp, donde nos indicarán todos los pasos a seguir. Este proceso está libre de gastos para aquellas personas que donan su vehículo, el cual podrán desgravarse en la próxima declaración. Para la recogida del vehículo la iniciativa cuenta con la ayuda de distintas empresas asociadas encargadas de la recogida e inspección para verificar que se encuentra en buenas condiciones.

Si no tienes coche, moto o algún vehículo que donar recuerda que también puedes realizar una aportación económica. Este dinero se destinará a la compra de vehículos, gastos logísticos, impuestos, matriculación y seguros.

«Este coche pertenecía a mi padre. En 2015 necesitaba un automóvil para desplazarse y decidí darle el mío y comprarme otro. Hace seis meses mi padre falleció y el coche volvió a mi garaje», comenta Arias. En un principio la familia no sabía muy bien qué hacer con el vehículo. «Hasta pensamos en darlo de baja». Al final decidieron achatarrarlo para acogerse al Plan MOVES y comprarse un coche eléctrico o híbrido enchufable. Pero todo cambió con el desastre de la DANA. Arias lanza una idea al aire: «Si el Estado permitiese aplicar el plan MOVES también con las donaciones a este desastre, se incentivaría la cesión de estos coches a los más afectados».

Si bien la compañía ofrecía la posibilidad de recoger el coche, ante el desbordamiento de la asociación, Arias decidió viajar él mismo hasta el lugar para entregar el coche y luego regresar en tren. «Y me alegro muchísimo de haberlo llevado yo. Ver con tus propios ojos la ayuda que puedes prestar a una familia que realmente lo necesite es una experiencia vital».