La conversación privada entre el alcalde de Málaga y Ruiz Araujo

De la Torre invita al concejal socialista a tener una charla en la intimidad a cuenta de los proyectos urbanísticos. Toni Morillas y Remedios Ramos, en el acto de la Desbandá dedicada a las mujeres

Pilar R. Quirós

Málaga

Viernes, 3 de febrero 2023, 00:24

El plan Litoral ya ha quedado claro que no saldrá adelante en este mandato municipal, que acaba el 28 de mayo, porque para realizar esta modificación urbanística de primer orden hace falta que se apruebe en el pleno, y ya se ha votado en un ... dos ocasiones en contra por la negativa en bloque de la oposición junto al socio de gobierno del PP, Cs. Pero aún así, para la oposición sigue siendo un caramelo, también de primer orden, porque pueden horadar al PP dejándole claro que en estos tres o cuatro meses verán el no repetidamente. Resulta que Unidas Podemos ya se salió con la suya en el pleno de noviembre cuando Cs los apoyó para decir que no veía idóneo la realización de este proyecto. En el pleno del pasado lunes volvían para sacar un nuevo rédito, momento en el que el poli malo del grupo socialista, el edil Mariano Ruiz Araujo, aprovechaba para decirle al alcalde Francisco de la Torre que en el ocaso de su carrera política no tenía la ciudad en mente, no tenía sucesor político y «eso sí tiene mucha gente que le susurra al oído y usted se deja llevar; por esto en esta ciudad no salen proyectos públicos y sólo ven la luz proyectos privados, que dejan dinero contante y sonante, y solo nos gastamos dinero en estudios y proyectos que nunca se realizarán (el plan litoral), más de 2 millones de euros, porque acallan susurros y asientan estómagos». Lo decía Ruiz Araujo en su primera intervención y lo repetía con ahínco en el tiempo extra que le dejaba De la Torre en la segunda para terminar su exposición, donde hablaba de la «aberración» que suponía el proyecto y que sólo obedecía a que quería tener contenta a la gente que le susurraba al oído.