Secciones
Servicios
Destacamos
Resultaba curioso oírla sabiendo todos lo de izquierdas que es la actual directora del Instituto de las Mujeres estatal, Toni Morillas, hablando de mujeres de otras tendencias políticas. Llamaba la atención que, cuando estuvo en el Ayuntamiento, en el periodo de los años 2011-2015, ... hacía la siguiente reflexión de la actual edil popular Teresa Porras. «Yo, salvando las distancias políticas, que son muchas y acusadas, reconozco el mérito de una mujer que ha salido del pueblo y que haya llegado a esta posición política en la vida», venía a decir, y añadía que aunque Porras no sabía que estaba empoderada, en realidad lo estaba muy mucho. Estas cuestiones las exponía dentro la confianza de su grupo municipal, pero hoy tocaba ponerla de ejemplo porque, en aquella época, también ella sin saberlo, practicaba la sororidad. Más adelante, entenderán el por qué de esta anécdota.
Llegaba ayer el Día Internacional de las Mujeres, y las concejalas, la mayoría, tenía planes para celebrarlo. Ni que decir tiene que las que han llegado a ser ediles están en la cúspide de la pirámide social, pese a que la política esté, desafortunadamente, tan desprestigiada. Así, a bote pronto, no sólo están bien representadas, sino que en el Ayuntamiento hay cuatro portavoces mujeres frente a un portavoz hombre. Véase. La portavoz popular, Elisa Pérez de Siles, la naranja, Noelia Losada, y la de Unidas Podemos, Paqui Macías así como una cuarta portavoz sui géneris por el equipo de gobierno (PP y Cs), una novedad de este mandato, que es Susana Carillo. Pero si se va al vértice, lo cierto es que los dos políticos en liza, alcalde Francisco de la Torre y líder de la oposición, Dani Pérez, son hombres.
Pero una vez no fue tal que así. Llegaba al gobierno de la ciudad la primera mujer que ha sido alcaldesa de Málaga en sus más de cinco siglos de historia desde la toma de la ciudad por los Reyes Católicos en 1487. No es otra que la popular Celia Villalobos, ya retirada de la política. Tomaba posesión en 1995 agotando el mandato en 1999, una época de difícil gobernanza porque lo hacía en minoría frente al PSOE y a IU, que obtuvo los mejores resultados de su historia con nueve concejales bajo el cartel de Antonio Romero. Cuentan las malas lenguas que Felipe González no le perdonó nunca que fuese su azote en el Congreso, y que después lo pagó no haciendo posible ese pacto de izquierdas, aunque tenían la mayoría.
Villalobos revalidó la Alcaldía en 1999 con mayoría absoluta y se marchó en abril a Madrid nombrada por José María Aznar como ministra de Sanidad. Detrás, fue eurodiputada y diputada en el Congreso hasta que se retiró de la política en febrero de 2019.
Pues bien, nadie en todo este tiempo, ni de su partido ni de los demás han reclamado que Villalobos, como primera alcaldesa de la ciudad, tenga un reconocimiento. Es bien cierto que la veterana política ya jubilada es especialista en polémicas y que suele generar a su alrededor una cohorte de filias y fobias. No deja a nadie indiferente. Aún así, y ahora viene la sororidad de la que hablábamos al principio de esta sección, a cada uno o una, lo suyo, y es más que evidente que ella protagonizó un hito histórico al tomar posesión como regidora.
Su antecesor, el primer alcalde de la democracia elegido por sufragio universal, el ya fallecido Pedro Aparicio, cuenta con una vía cercana al PTA, avenida Alcalde Pedro Aparicio, y recibió a título póstumo (2015) la medalla de la Ciudad, que gobernó durante 16 años, y el título de hijo adoptivo, ya que nació en Madrid. Hay otros regidores malagueños que ostentan nombres de calles, vías, parques o colegios en la ciudad tales como Gálvez Ginachero, Sánchez Pastor, Liborio García, Pedro Luis Alonso, Antonio Gutiérrez Mata, Francisco García Grana y Manuel Pérez-Bryan, entre otros.
Haciendo memoria, las concejalas socialistas María Gámez y Estefanía Martín Palop firmaban una moción en abril de 2016 para pedir que más calles tuvieran nombres de mujer. Se quejaban de que 2007 a 2014, sólo el 7% de las calles eran de féminas; y de 2007 a 2014, frente a 63 nombres de hombres sólo se contabilizaron cinco mujeres. Le entregaron a De la Torre un listado con 80 vías de féminas reseñables, pero ninguna de ellas, tampoco, era para Villalobos. Sin gestos fuera ni dentro, ayer el Día de la Mujer, la única regidora de Málaga aún no tiene un reconocimiento acorde al hecho histórico de calado que supuso su paso por la Alcaldía. La primera en más de 500 años.
Tras la polémica sobre la devolución por parte del alcalde Francisco de la Torre de la medalla Pushkin a Putin, y referente a cortar las transferencias dinerarias al Estado Ruso por las colecciones del Museo de San Petesburgo que llegan a Málaga, peticiones del portavoz socialista, Dani Pérez, así como del presidente de la Junta, Juanma Moreno, que finalmente De la Torre iba a cumplimentar, ayer se puso sobre la mesa una novedad. El regidor anunció que convocará un pleno extraordinario para mañana jueves con el objetivo de debatir sobre la solidaridad de Málaga con Ucrania, punto en el que se debatirán sobre ayudas específicamente municipales, así como la continuidad del Museo Ruso en Málaga, que tantas suspicacias está levantando. Lo cierto es que, como explicaba ayer este periódico, la dirección del museo está «a la expectativa» de lo que vaya a pasar más allá del 24 de abril cuando oficialmente se clausuran las exposiciones que están en marcha, las mismas que están firmadas por contrato y pertinentemente aseguradas.
Precisamente, el edil de Unidas Podemos, Nicolás Sguiglia, pedía ayer que la recaudación del Museo Ruso se destine a ayuda humanitaria para el pueblo ucraniano. En cuanto a Pérez, éste acaba de ser padre de su segunda hija y ha pasado a tomarse su baja por paternidad, por lo que no asistirá al pleno.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.