El Ayuntamiento de Málaga acata sin rechistar la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) y no recurrirá en casación al Supremo. Repetirá, ... por tanto, una de las pruebas de las oposiciones a bomberos, que le exige el Alto Tribunal Andaluz, según indicaron a este periódico fuentes municipales.
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Tres bomberos impugnaron la prueba en primera instancia, y ahora el TSJA, ante la apelación del Ayuntamiento de Málaga, les volvió a dar la razón. Una situación, que resulta a todas luces un papelón para el Consistorio, ya que le obliga a repetir uno de los ejercicios para la cobertura de once plazas de cabo de bomberos mediante promoción interna, que se realizaron ni más ni menos que en 2018, y que en la actualidad están cubiertas.
No obstante, el Ayuntamiento ya ha dejado claro que no recurrirá y que estudia cómo realizar la prueba al tiempo que avanza que los once cabos que aprobaron la oposición seguirán en sus puestos, según informaron a este periódico. Respecto a la nueva prueba, indicaron que una vez se realice, si hay más aprobados se aumentaría en tal caso la oferta de puestos de cabo de bomberos.
Pero, ¿cuál es el motivo de fondo por el que debe repetirse una prueba? La sala de lo Contencioso-administrativo del TSJA confirmaba en su fallo todos los pronunciamientos de la sentencia en primera instancia, de 2022, y condenaba en costas al Ayuntamiento, por lo que éste deberá retraer «las actuaciones del procedimiento selectivo, debiendo celebrarse el primer ejercicio», en el que el tribunal indica que deben prevalecer los principios de objetividad y transparencia. La denuncia parte porque en el primer ejercicio, el 20 de junio de 2018, el tribunal ya había extraído las bolas con los números de los temas a desarrollar, de modo que los aspirantes no pudieron ver cuándo se habían elegido, si se habían realmente escogido al azar y si en el bombo estaban todas las bolas. La secretaria del tribunal de oposiciones era Eva Ruiz, precisamente la actual directora general de Recursos Humanos y Calidad. «Aunque las bases no exigían la presencia de los aspirantes en el momento de la extracción de los temas», el tribunal considera que debe cumplirse la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público, por lo que estima «irregular» la actuación del tribunal calificador.
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Indica el TSJA que esta prueba debió hacerse en presencia de los opositores, y lo sustenta en que el propio Ayuntamiento, para las sucesivas oposiciones, optó por llevar a cabo dicha extracción en público. Cita entonces el interesante artículo 1281 del Código Civil, que establece que «para juzgar la intención de los contratantes deberá atenderse principalmente a los actos de éstos, coetáneos y posteriores al contrato» por lo que desestima el recurso de apelación del Ayuntamiento de Málaga. En román paladino viene a decir que si el Consistorio después de esta prueba, que fue impugnada, empezó a sacar las bolas de los temas para las siguientes oposiciones delante de los opositores deja claro que esa es la forma adecuada de actuar.
«El principio de publicidad debe actuar en toda su plenitud para así garantizar la igualdad de trato entre los opositores», como indica el Alto Tribunal Andaluz, quien subraya que ese acto debió hacerse en presencia de los que se examinaban.
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El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga, Dani Pérez, junto a ediles de su grupo, se ha apostado este miércoles a las puertas del Hospital Pascual calentando motores para el pleno extraordinario que se celebra hoy jueves, y al que ha forzado al alcalde de Málaga, Paco de la Torre, a fecharlo, para debatir sobre «el caos extremo de la sanidad pública en Málaga». Ha aprovechado para decir que «hace dos años el presidente de la Junta se comprometió a abrir el Hospital Pascual para la sanidad pública y ya sabemos que no lo hará», como puntualizó.
Respecto al pleno extraordinario, el socialista ha dado cuenta de que arrancará con la petición de comparecencia del alcalde (aunque el regidor en puridad puede delegarla en cualquiera de sus concejales). Los socialistas, por su parte, esperan que «dé la cara».
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En esta línea, Dani Pérez explicaba que «Juanma Moreno junto a Elías Bendodo y Paco de la Torre hacían campaña permanente en la calle con pancartas, manifestaciones y concentraciones para exigir al gobierno de la Junta socialista aminorar las listas de espera, pero lo cierto es que a día de hoy, en que se han triplicado, Paco de la Torre calla, ya no protesta».
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