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El Ayuntamiento de Málaga admite que va lento, pero confía en completar en los dos próximos años el plan para reparar las grietas de los edificios de la barriada de Carranque que se puso en marcha a raíz de un estudio realizado hace una década. Tras las críticas de los vecinos de los edificios afectados por las fisuras recogidas por SUR en los últimos días, el Consistorio ha anunciado este martes que antes de final de año comenzarán las obras para una segunda fase de rehabilitación de la zona de la que se beneficiarán 148 viviendas.
Esta segunda fase, que se prolongará hasta el año 2026, se llevará a cabo con un 50% de subvención de la Junta, y un 35% del Ayuntamiento (1,2 millones de euros), por lo que los vecinos deberán sufragar el 15% del presupuesto de las reparaciones, según ha informado el concejal de Vivienda, Francisco Pomares, quien ha detallado que, de este modo, quedarán subsanadas casi la totalidad de las 270 viviendas afectadas por las grietas (17 unifamiliares y el resto en 37 edificios), de un total de 2.112 que existen en esta barriada construida a mediados de la pasada centuria. «Quedarán 14 que no han entrado en esta segunda etapa de ayudas públicas a la rehabilitación, pero con las que el Ayuntamiento llegará a acuerdos para financiarlas en un 90%, como ya hicimos con la primera fase de 108 viviendas, ya reparadas, lo que ha supuesto una inversión de 2,5 millones de euros en total», ha informado el concejal.
El equipo de gobierno municipal ha admitido que el proceso para rehabilitar las viviendas va lento por las exigencias de la Junta a la hora de reclamar a los vecinos una documentación que en muchas ocasiones no existe, como ha reconocido Miguel Rueda, presidente de la asociación de vecinos de Carranque. «Hay personas que todavía no han hecho las escrituras porque no tienen recursos económicos», ha admitido. «Es verdad que la Junta va lenta, pero el resultado va a ser positivo. El arreglo de la cimentación no se puede hacer de un día para otro, pero desde luego se rehabilitarán las viviendas de Carranque», ha aseverado la concejala del distrito de Cruz del Humilladero, Teresa Porras, quien también ha participado en la convocatoria para dar respuesta a las críticas mostradas por algunos vecinos en los últimos días.
Miguel Rueda ha arremetido contra otros portavoces vecinales de la zona, a los que ha criticado por crear una mancomunidad y exigir a los residentes dinero «para pagar un proyecto que el Ayuntamiento ya lo estaba haciendo gratis». «Hay que ser mala persona para hacer una mancomunidad, y coger dinero de los vecinos para no hacer nada», ha manifestado Rueda, quien ha apuntado que algunos no han abonado el 10% de las obras para completar la subvención del 90% otorgada por el Instituto Municipal de la Vivienda.
«Lo primero que hay que hacer es sentarse con el Ayuntamiento, que es el que está dando la cara, y ver los problemas uno por uno, con cada uno de los vecinos. Después de tres años, no estoy contento con la Junta, que pide una documentación que es imposible de obtener», ha señalado el presidente de esta asociación de vecinos, que lleva 25 años esperando el arreglo de las grietas. «Hay que seguir el proceso que se está haciendo. Hay que hacerlo progresivamente», ha insistido, al tiempo que ha confiado en que en enero comiencen las obras de reparación de un total de 12 edificios que lo necesitan de manera urgente.
Por su parte, la asociación Proyecto Carranque ha remitido un comunicado en el que piden una nueva reunión con el equipo de gobierno local y denuncian que «se ha malgastado dinero público porque todos los planes de rehabilitación, tanto de la Junta de Andalucía como del Ayuntamiento, se han basado en maquillar en lugar de realizar un estudio previo del subsuelo, que es de donde arrancan los problemas de los edificios». «Es sobrecogedor escuchar muchos testimonios de vecinos que viven en casas que crujen por las noches, que tienen miedo a que llueva porque el agua entra por las grietas, que ven la calle a través de las fisuras o que inhalan el humo de la circulación en la avenida de Andalucía, con techos que se caen, suelos que se abren, aceras que provocan caídas, incluso mortales…», han añadido.
Asimismo, la directiva de Proyecto Carranque ha desmentido las afirmaciones del presidente de la asociación de vecinos de Carranque y ha asegurado que «Proyecto Carranque no gestiona ningún dinero, no cobra cuotas a sus socios ni cobra subvenciones». «Somos una asociación de voluntariado vecinal, que estamos aquí para reivindicar todas las acciones necesarias para mejorar de verdad el barrio, y así lo haremos gobierne quien gobierne, en todas las administraciones», han remarcado.
El concejal de Vivienda ha admitido que los desperfectos que presentan las viviendas de Carranque se deben a problemas de estabilidad del terreno sobre el que se construyeron en los años cincuenta del pasado siglo. «Eso se arregla con cimentación, porque en su día no se hizo una cimentación adecuada en un terreno que tal vez lo necesitaba», ha apuntado Francisco Pomares, quien ha intentado quitar hierro al asunto al señalar que solo un 13% de las viviendas de la barriada están afectadas por este problema. No obstante, ha asegurado que el Ayuntamiento seguirá vigilante y dispuesto a poner en marcha ofertas de subvenciones para colaborar con los vecinos en la reparación de sus casas.
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