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Sorpresa política en el Ayuntamiento de Málaga, donde la acción discordante del edil no adscrito Juan Cassá se ha vuelvo a dejar notar y ha impedido por segunda vez al equipo de gobierno aprobar el expediente urbanístico necesario para que el local de la conocida como 'esquina de oro' del centro comercial Muelle Uno, en el puerto de Málaga, pueda albergar un espacio de 'coworking' –oficinas en alquiler para emprendedores– promovido por el grupo Urbania International. Este asunto fue abordado en la comisión plenaria de Ordenación del Territorio del mes pasado, pero fue tumbado por los votos en contra de los grupos de la oposición, PSOE y Adelante Málaga, ante la ausencia entonces en el salón de plenos de la concejala de Ciudadanos, Noelia Losada, y del concejal no adscrito Juan Cassá, que suelen sumar sus votos en el mismo sentido del equipo de gobierno.
Losada no pudo asistir a esa comisión por problemas de agenda y Cassá llegó tarde, cuando ya se había votado ese punto. Así, fue rechazado con siete votos en contra y seis a favor. Este lunes se ha vuelto a llevar el punto al orden del día de la sesión y tampoco ha podido ser aprobado porque, de forma sorpresiva, Juan Cassá ha votado en contra. Así ha sucedido por dos veces, ya que el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, ha ordenado repetir la votación ante la creencia de que se había producido algún error. Sin embargo, al comprobar que Cassá volvía a votar en contra, ha admitido que el expediente quedaba por segunda vez rechazado por ocho votos en contra de cinco concejales del PSOE, dos de Adelante Málaga (IU y Podemos) y el ya mencionado de Cassá. A favor han votado seis concejales del PP y la concejala de Ciudadanos. Siete apoyos que han resultado insuficientes para sacar adelante el expediente.
Urbania pretendía abrir en la esquina de Muelle, bajo la marca Monday, un centro de oficinas mediante el pago por uso del espacio, que ofrecería variedad de tarifas y servicios flexibles que permitirán la ocupación de mesas y despachos por días, semanas o meses. Sin embargo, todo apunta a que, salvo que el equipo de gobierno logre convencer a Cassá de que cambie de postura para una próxima sesión de la comisión plenaria de Ordenación del Territorio, este proyecto para dar uso a la 'esquina de oro' del puerto se queda en un cajón.
Ya el mes pasado, Cassá rompió su acostumbrada disciplina con el PP y votó junto al PSOE en el pleno de transparencia para respaldar dos propuestas sobre el Centro de Arte Contemporáneo (CAC) y Promálaga. No obstante, en esta ocasión ha bloqueado un expediente urbanístico promovido por un grupo promotor que, según ha enfatizado a este periódico Raúl López al término de la sesión, cumple con todos los parámetros legales. Por ello, el concejal de Urbanismo ha anunciado que volverá a traerlo "todos los meses" a la comisión hasta que sea aprobado. "No hay un argumento para votar en contra, ese espacio no se puede dedicar a otra cosa que no sea equipamiento u oficinas como se pretende ahora", ha remarcado. En el anterior debate sobre este punto, PSOE y Adelante Málaga argumentaron su rechazo en que deben potenciarse los espacios logísticos del puerto.
Este periódico ha abordado a Juan Cassá cuando ha abandonado el salón de plenos para preguntarle por los motivos de su voto en contra en este punto, pero el edil no adscrito se ha negado a dar explicaciones. "Lo siento, no voy a hablar", se ha limitado a decir.
Por otra parte, sí ha sido aprobado de manera definitiva, aunque con el voto de calidad del concejal Raúl López, el estudio urbanístico para la construcción de un centro privado de Formación Profesional (FP) con residencia de estudiantes para 82 plazas en una parcela de titularidad municipal ubicada junto a la Ciudad de la Justicia. En este caso, ha sido necesario el voto de calidad de López para desempatar la votación (siete votos a favor y siete en contra) porque Juan Cassá tampoco ha seguido el sentido del voto del equipo de gobierno y se ha abstenido, en vez de votar a favor como han hecho los concejales del PP y la edil de Ciudadanos. La oposición, por su parte, ha votado en contra.
Esta iniciativa educativa que ha sido aprobada por los pelos está promovida por la compañía malagueña de formación Cesur (perteneciente al grupo Coremsa), que en febrero del año pasado resultó adjudicataria de la concesión licitada por la Gerencia Municipal de Urbanismo por un plazo de 37 años a cambio de un canon de 1.917.000 euros.
En una parcela ubicada en el número 5 del bulevar Louis Pasteur se desarrollará una inversión de 10 millones de euros para levantar una residencia de 21 ciclos, con capacidad para más de dos mil alumnos. El centro, que podría empezar a funcionar para septiembre del año que viene, contará con un polideportivo cubierto anexo y con pistas deportivas sobre el edificio.
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