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Imagen de la comisión de Derechos Sociales, este mediodía. V. R.
El Ayuntamiento de Málaga condena el «discurso de odio» contra el colectivo LGTBI de Vox con la abstención del PP

El Ayuntamiento de Málaga condena el «discurso de odio» contra el colectivo LGTBI de Vox con la abstención del PP

El concejal popular Francisco Pomares intentó enmendar la iniciativa para incluir a todos los partidos, grupos y colectivos que hicieran lo mismo desde las instituciones, pero el PSOE no la aceptó

Jueves, 22 de julio 2021, 15:09

La mañana en el salón de plenos del Ayuntamiento ha sido muy intensa. Al cambio de rumbo de los votos del edil no adscrito Juan Cassá, que han ido a parar sorpresivamente a la oposición pese a la «lealtad» de la que hablaba ayer el alcalde Francisco de la Torre que tenía, y de que el 99% de las veces votaba a su favor (del equipo de gobierno del PP y Ciudadanos), se ha sumado otro episodio, que seguramente va a traer cola. La Corporación ha aprobado, con abstención sólo del PP (es decir con los votos del PSOE, Adelante, Ciudadanos y Cassá a favor) que se inste al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Málaga a que condene «todos los discursos y acciones discriminatorios y de odio realizados desde las instituciones por Vox en contra del colectivo LGTBIQ+», que aunque es una exigencia para el equipo de gobierno lo que deja claro, de facto, es que todos los que han votado a favor lo condenan.

El proponente de la iniciativa, el socialista Pablo Orellana, que es homosexual, ha narrado de forma muy íntima y con mucho conocimiento de causa lo que sufren las personas de este colectivo desde que son pequeños, y ha puesto el dedo en la llaga diciendo que desde las instituciones no se deben alentar estos discursos que luego se pueden traducir en la calle en insultos, empujones y acoso, y en ocasiones las cosas van mayores, explicando el caso de Samuel, que en Vigo murió al grito de maricón, o el ejemplo de la agresión a una pareja en Teatinos (concretamente pintadas en su domicilio) y el caso de la agresión homófoba que sufrió Jaime Poniente en la playa del Guadalhorce. Orellana, que suele emocionarse cuando habla de estas cuestiones y al que se le pueden entrecortar las palabras cuando las explica, subrayaba con mucho ahínco que las agresiones de LGTBIfobia son delitos de odio, y que desgraciadamente han aumentado mucho en los últimos cinco años. Por eso, incidía que cuando Vox aplica el voto parental para que en las clases no se hable de la diversidad sexual, cuando consiguen que las celebraciones del Orgullo tengan lugar en sitios apartados, cuando presionan para que no se cuelgue la bandera LGTBI en las instituciones, «no sólo se nos está negando, se nos está humillando. Esto ha enardecido a personas que nos miren mal, nos insultan y hasta nos matan«, añadió.

Todos los partidos se posicionaron en contra, en sus discursos, de los delitos de odio contra este colectivo, pero el concejal popular Francisco Pomares pedía que se incluyeran a todos los grupos y colectivos que pudieran desarrollarlos dentro de las instituciones, no sólo a Vox, una enmienda que no fue aceptada por el PSOE, el grupo proponente, de tal forma que finalmente el PP era el único grupo que se abstenía en la votación. «Hablar de delitos de odio de Vox es una cuestión seria, y si hicieran delitos de odio estaría prohibido. Yo no sé lo que hacen porque no los tengo aquí (en el Ayuntamiento«, contestaba a preguntas de este periódico al finalizar la sesión. Y añadía, que como había dicho »los discursos se combaten con discursos en las instituciones, y la violencia, con la Policía«. Por último, Pomares apuntaba que lo que quería el PSOE era una cuestión más política en este punto. Esta iniciativa se traía hoy a la comisión de Derechos Sociales precisamente porque es el Día Europeo de la Conmemoración de las Víctimas de Delitos de Odio, del que se ha celebrado un acto en el patio de banderas, presidiendo el acto los concejales populares Ruth Sarabia (Participación) y Avelino Barrionuevo (Seguridad).

El resto de los puntos salían adelante por unanimidad de todos los grupos y Cassá para pedir al equipo de gobierno que desarrolle el I Plan Municipal de Diversidad Sexual, Familiar y de Género, un protocolo en colaboración con el Consejo Sectorial LGTBI para activar gestos de condena institucional por parte del Ayuntamiento a las agresiones graves por motivos de LGTBIfobia que tengan en Málaga, así como realizar una campaña municipal específica de sensibilización.

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