Soledad Ruiz, Ruth Sarabia, Kader Miguel Djebbour, José Vicente Astorga, Francisco Pomares, Natacha Rivas y Fernando Cubillo, antes de empezar el debate. Foto: Salvador Salas | Vídeo: Pedro J. Quero

Asignaturas pendientes en la ayuda a domicilio: desde la necesidad de un convenio regional a la innovación tecnológica

Representantes institucionales, empresas y sindicatos hacen balance de este servicio esencial y plantean mejoras en una mesa redonda organizada por SUR y Clece

CRISTINA PINTO

Martes, 15 de noviembre 2022

Son 140.000 personas en Andalucía las que reciben el servicio de la ayuda a domicilio y cada año esa cifra va en aumento. Al igual que siguen creciendo las asignaturas pendientes que reclama este servicio esencial, que la semana pasada recibió una buena noticia ... por parte del viceconsejero de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, José Repiso: «Próximamente la Junta de Andalucía podría anunciar una subida del precio que paga por estos servicios». De este anuncio reciente -además de plantear otras posibles mejoras en el sector- se debatió en la mañana del martes desde el AC Málaga Palacio en la mesa técnica que organizaron SUR y Clece: 'Ayuda a domicilio, balance de un servicio esencial'.

Publicidad

Sentados y listos para el debate moderado por el periodista José Vicente Astorga, adjunto a la Dirección de SUR, estaban la delegada de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía, Ruth Sarabia; la vicepresidenta segunda de la Diputación de Málaga, Natacha Rivas; el concejal del Área de Derechos Sociales, Igualdad, Accesibilidad, Políticas Inclusivas y Vivienda del Ayuntamiento de Málaga, Francisco Pomares; la secretaria general de UGT Málaga, Soledad Ruiz; el secretario general de CCOO Málaga, Fernando Cubillo, y el delegado de Andalucía Centro de Clece, Kader Miguel Djebbour.

Y arrancaba la mesa técnica recordando esa financiación inalterada que se vivió desde 2007 en Andalucía hasta que el año pasado la Junta elevó de los 13 euros la hora a los 14,6 para afrontar los costes del servicio. «Creo que estamos en un buen momento para aumentar el presupuesto, pedimos una ampliación a 25 euros», lanzaba la propuesta desde CCOO Fernando Cubillo. «Para eso es necesario tener diálogo con las administraciones, que son quienes financian; estoy a favor de un convenio que regule el sector a nivel regional», pedía la secretaria genera de UGT Málaga, Soledad Ruiz. Esas asignaturas pendientes las resumía el malagueño Kader Miguel Djebbour: «Los auxiliares de Andalucía y Extremadura son los peores pagados de España. Necesitamos un buen convenio y tasas salariales para hacerlo atractivo a ese relevo generacional que se está viendo afectado».

En respuesta a eso, la delegada de la Junta, Ruth Sarabia, volvía a insistir en la noticia del nuevo diálogo que ya se está planteando: «Ya hay una mesa técnica dentro de la Consejería para proponer que por fin salgamos del convenio nacional para tener uno propio en Andalucía. Aquí se ha hablado de la infrafinanciación, pero es que 3 de cada 4 euros que se dedican a la ayuda a domicilio lo pone la Junta de Andalucía; se supone que el 50% lo debería poner el Gobierno de España y eso jamás se puso, gobernara quien gobernara. Creo que los pasos para mejorar los estamos dando, pero hay que tener en cuenta que partimos de una situación de diez años de congelación», matizaba Sarabia.

«Lo que buscamos en el Ayuntamiento no es competir por dinero, sino por calidad. El verdadero problema son los tiempos, que una persona para tener este servicio tarde un año y medio o dos años», puntualizaba el concejal Francisco Pomares. «No es solo dinero, son muchos indicadores, por eso es necesario un diálogo social con una negociación colectiva paralela», concretaba soledad Ruiz. Mientras, Ruth Sarabia planteaba una mejora en los tiempos: «Hay que mejorar esos procesos burocráticos porque pensar que se pueda tardar un año y medio hace que nos llevemos todos las manos a la cabeza. Málaga va a ser un lugar pionero en el que a primeros de año vamos a poder contar con un sistema informático que va a reducir los plazos de manera fundamental».

Publicidad

«Pulseras y andadores inteligentes»

Pero había otra cosa que revelar en esta mesa de debate por parte de Ruth Sarabia: «Con los fondos Next Generation hemos pedido cinco millones de euros que se nos han concedido para trabajar en un proyecto que mejora la capacidad de estar en casa a través de la tecnología. En él se recrea la vivienda de una persona dependiente y se incluirán las posibilidades que nos da la domótica para reforzar y ayudar al profesional de la ayuda a domicilio: desde pulseras que avisen si la persona lleva mucho tiempo sentada hasta andadores inteligentes con recorridos programados», anunciaba la delegada de la Junta. «Aunque sea algo difícil de trasladar, la tecnología también ha llegado para ayudar a estas personas», añadía Natacha Rivas. Algo que a lo que también hacía alusión Fernando Cubillo: «Son necesarias inversiones en maquinarias que faciliten el trabajo».

Dejando a un lado la innovación tecnológica y la financiación, en el debate llegaba el momento de hablar de dignificar y profesionalizar el trabajo que hacen desde la ayuda a domicilio, algo que resaltaba la vicepresidenta segunda de la Diputación: «El fin son las personas a las que se cuidan. Hay que mejorar en dignificar, en valorar profesionalmente el servicio porque esto va más allá de un simple día, aquí hay un vínculo y calidad humana detrás de todo».

Publicidad

Desde Clece en Andalucía trabajan codo con codo con ese personal, ya que emplean a 27.000 de los casi 40.000 trabajadores dedicados a la ayuda a domicilio, pero Keder Miguel Djebbour lamentaba un dato: «Hay falta de candidatos... Con ayuda de la Diputación nos movimos por la provincia en un autobús convertido en oficina de empleo para buscar varios perfiles y no hay gente suficiente. Los que tienen la formación prefieren dedicarse a otros sectores y es que lo que se encuentran laboralmente es un convenio con unas tasas muy bajas». La importancia de la profesionalización también la resaltaba Pomares: «Nos ha costado 15 años dar a entender a las familias que como ellos quieren a sus padres no los va a querer nadie, pero que necesitan a un profesional».

Llegaron las preguntas del público, que llenó la sala del AC Málaga Palacio y luego concluía esta mesa técnica organizada por SUR y Clece que había abordado desde las buenas noticias de una nueva posible subida en la financiación a la necesidad de un convenio regional pasando por planteamiento de mejoras en la formación y situación laboral para hacer de este sector un trabajo más atractivo para las nuevas generaciones, que llegan de la mano de esa tecnología que también se quiere sumar a la ayuda a domicilio.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad