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El alcalde de Málaga Paco de la Torre sufría un percance el lunes por la mañana en su habitual ruta hacia el Ayuntamiento. Cuando cruzaba delante de la Casona, por el carril bici habilitado hace unos escasos meses, era atropellado por un patinete que pasaba ... en ese momento. El primer edil cruzaba por el paso de peatones, que existe dentro del carril bici, pero la conductora del patinete no paró y le dio, al parecer, de refilón.
La conductora se paró y le preguntó si se había hecho daño, según cuentan los presentes, y más tarde confirmaban fuentes municipales, mientras que De la Torre le indicó que no se preocupara, que se encontraba bien. Esto fue por la mañana, y por la tarde indicaba a su equipo que se estaba perfectamente y que no le dolía nada. Esto puede ser así, pero resulta sorprendente que habiendo un paso de peatones bien pintado dentro del carril bici, los que utilizan el mismo no aminoren la marcha ni se paren para ver si van a pasar peatones.
Anteriormente, los atropellos de bicis y patinetes se producían en el Parque, donde estaba pintado el carril bici en el suelo (algunos funcionarios pueden dar fe de ello por haberlo visto, y alguno por sufrirlo) y ahora, carril bici pintado, y paso de peatones bien marcado, las velocidades a las que van los usuarios de los patinetes, sobre todo, siguen siendo altas. Pero lo más llamativo, sin duda, es que habiendo un paso de peatones gigantesco (el mismo que hay en la calzada para los coches justo al lado), los que usan el carril bici no se avengan a pararse cuando ven que lo están cruzando personas. Algunos empleados públicos comentaban que quizás falta una mejor señalización del paso de peatones para que no vuelva a ocurrir. Y multas. Porque, en este caso, el alcalde ha salido al parecer indemne del suceso, pero nunca se sabe.
Pistoletazo de salida a los pactos y las alianzas, el portavoz socialista Dani Pérez pedía la semana pasada una alianza por la vivienda en Málaga, y este lunes los dos concejales de Con Málaga, la portavoz, Toni Morillas, y el viceportavoz, Nicolás Sguiglia demandaba un pacto local en pro de una educación pública de calidad. Los ediles se rodeaban de representantes de los colegios Domingo Lozano, cuyos niños han sido reubicados en otros colegios cercanos puesto que el centro tiene problemas estructurales, como explicaba la representante de los padres, Claudia Benítez; así como del colegio Intelhorce, que lleva cinco años cerrado y a la espera de que se ejecuten las obras para que se abra, como daba cuenta la presidenta del ampa, Belén Jiménez. Representantes, a su vez del sector de la educación de Comisiones, Yolanda Gamero, y de Ustea, Carmen Máximo.
Morillas subrayaba que su grupo municipal llevará al próximo pleno una iniciativa en defensa de la enseñanza pública frente a un alcalde que cede parcelas de la ciudad a universidades privadas mientras que «abandona los colegios públicos». En esta línea, Sgugilia, le afeaba al regidor que hablase tanto de la importancia de la educación y luego no lo demostrara con las inversiones en colegios públicos, a la vez que le daba un tirón de orejas a la Junta por gastar 25 millones de euros en los Grammy latinos, «dinero con el que se podían construir ocho colegios públicos en Málaga», que sacaba a colación por la situación de los ya mencionados centros públicos Domingo Lozano e Intelhorce.
Morillas exigió un plan de mejora y conservación de los colegios públicos para que estén en condiciones dignas, así como un pacto local en defensa de la escuela pública, al que se sumen todos los partidos políticos y organizaciones sindicales, entre otros, con un plan de trabajo específico que permita mejorar la calidad de la enseñanza pública.
Este asunto se verá en el pleno ordinario de este mes, que se ha pasado del jueves al viernes, con motivo de que el alcalde y algunos munícipes asistirán a la feria de turismo en Madrid, Fitur.
La viceportavoz socialista, Begoña Medina, criticaba este lunes los «fraccionamientos de contratos menores sin justificar, precios inflados e irregularidades en las empresas municipales», que calificaba como «propias de chiringuitos».
La viceportavoz pedía explicaciones al alcalde Paco de la Torre sobre los informes que está firmando de las empresas municipales el interventor general, que revela, a su juicio «una administración irregular en el holding del Ayuntamiento de Málaga», así como «una mala praxis», como puntualizó.
Explicaba que el interventor no justificaba «el abuso de contratación menor, el fraccionamiento de contratos para que no tengan que pasar por concurso público y poder adjudicarlos a dedo, y el incumplimiento la Ley de Transparencia», y daba cuenta de que el habilitado nacional también critica en su informe anual que en la Sociedad Municipal de la Vivienda «hay una cesión ilegal de trabajadores al Instituto Municipal de la Vivienda, lo que a todas luces se puede interpretar como una duplicidad de funciones», como subrayaba la socialista.
También se quejó Medina del contrato «a dedo» del arquitecto que «sustituyó a la jefa de la Oficina técnica de las obras del aparcamiento de Pío Baroja para que firmara los sobrecostes en los trabajos de este parking».
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