El Arroyo Jaboneros no está preparado para las lluvias

«El día que diga de llover, muchos vecinos saldremos nadando» comenta A.R, vecina natural de Pedregalejo y lectora habitual de SUR. Se refiere al estado del Arroyo Jaboneros, situado al este de la ciudad. Éste tiene una gran cantidad de maleza descontrolada en su interior, algo que aunque es habitual, preocupa a muchos residentes que piensan que puede ser un problema si llegan lluvias torrenciales de primavera. Este redactor tuvo la oportunidad de desplazarse hasta la zona y pudo comprobar que lo que denuncian los residentes es más que tangible, de hecho, se ve desde la carretera la maleza sobresalir de los muros del cauce.

Es un lugar que utilizan muchos locales para pasear a sus mascotas y darse largos paseos que pueden acabar cerca del mar, no obstante, si haces uno de estos encontrarás vegetación de más de tres metros y afloración de otras que dejan poco espacio al agua si ésta llenase el cauce del arroyo en una lluvia torrencial.

Este asunto recuerda al que se trató justo hace un año (y sigue coleando) con el cauce del Guadalmedina, en el que sobre todo a la altura de La Rosaleda tenía una flora incipiente que preocupaba a los expertos. Sin embargo, como ya comentó este periódico, el equipo de gobierno municipal no ha impulsado todavía proyecto alguno para adecentar el tramo del cauce aguas abajo del puente de Armiñán, a la espera de que pueda desarrollarse o no el plan de más de 200 millones de euros que tramita ante la Junta.

Hay que comentar también las cosas buenas, y son algunos los lectores de SUR que nos transmiten el acierto de las administraciones al colocar pivotes en las aceras que dan al Colegio León XIII, impidiendo así que los coches (padres que recogen a sus hijos) se queden encima de la acera ocasionando una doble fila muy peligrosa para la visibilidad de los que siguen su trayecto y, por consiguiente, también para los pequeños que salen de la escuela a pie. «Desde hace unos meses se puede ver que el tráfico y la movilidad es mucho más fluida por esta zona», comenta una vecina.

Por contrapartida al texto de la columna anterior, en otras zonas cercanas a colegios continua el peligro. Lo explica Salvador García, lector habitual de SUR y residente en Los Almendrales: «Los vecinos del camino de los Almendrales estamos hartos de soportar tanto tráfico y a altas velocidades, se ha convertido en vía rápida de la entrada y salida de la autovía A7. No es normal a las velocidades que suben y bajan los coches en esta avenida, en la cual existe un colegio con más de mil alumnos. Cualquier día ocurrirá una desgracia», se lamenta indignado.

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