El Ayuntamiento de Málaga no pedirá al de Madrid que retire el nombre Crucero Baleares del callejero

Ni el Ayuntamiento de Málaga ni el alcalde Francisco de la Torre pedirán al Ayuntamiento de Madrid ni a su regidor José Luis Martínez-Almeida que apee del callejero de la capital de España el nombre de Crucero Baleares. El equipo de PP y Ciudadanos, sobre todo la concejal de Cultura y portavoz naranja Noelia Losada, argumentaban su decisión en que había una sentencia en segunda instancia por la que el acuerdo plenario durante el mandato de Manuela Carmena y su resolución para quitar 52 calles de Madrid, en este caso en particular, carece de motivación. Explicaba Losada que para que la calle esté en contra del artículo 15 de la Ley de la Memoria Histórica debía exaltar el franquismo y el levantamiento militar, y que en este caso no se sabía si el nombre de Crucero Balear era por los 800 fallecidos que se hundieron con el barco o por su implicación en los bombardeos de la carretera de Almería, pero que «en la actualidad nadie sabe que exalta el franquismo porque la gente lo desconoce». Losada seguía su argumentación diciendo que estaban en contra de todas las dictaduras, y de la franquista también, además de la cubana, y que Málaga había sido un ayuntamiento ejemplar con el proyecto de Parque de San Rafael, pero que no iban a desobedecer una sentencia judicial. Por su parte, el concejal popular Luis Verde dijo que las condolencias se la dan a todos los familiares de los que murieron en la contienda (civil) y que «no hay bandos, hay víctimas de un lado y de otro; buscamos un concepto que no terminan de entender que es la concordia (le decía a la oposición), y en este caso no se trata de un capricho, se trata de cumplir una sentencia», argumentó.

Tanto la edil socialista Lorena Doña como la viceportavoz de Adelante, Remedios Ramos, se afanaron en demostrar lo «indigno» que era que una calle de Madrid tuviese el nombre de un crucero, el Baleares, que había bombardeado a miles de civiles mientras huían de las tropas franquistas, este barco y el Crucero Canarias, así como los aviones fascistas italianos y alemanes, pero se toparon con la sentencia que enarbolaban tanto PP y Ciudadanos. Doña explicaba que a los malagueños nadie puede explicarle qué es la Desbandá, «una barbarie que sufrieron unas 13.000 personas, pero podemos entender que el alcalde de Madrid no esté al tanto, lo que no entendemos es que el alcalde de Málaga no haya informado al alcalde de Madrid. Pedimos sensibilidad y que después de 85 años no sigamos echando sal a la heridas de los familiares masacrados». Para Ramos era una falta de respeto que el barco que bombardeó a miles de malagueños tenga una calle en Madrid, y recordó como el propio Ayuntamiento de Málaga había homenajeado este lugar nombrando la vía como 'El Camino de los canadienses', por lo que dijo no entender el retroceso que estaba teniendo actualmente tanto el Consistorio, como el alcalde, que había ido en varias ocasiones al acto de homenaje a los fallecidos en la Desbandá, y en una ocasión incluso fue defendido por su compañera Toni Morillas de los que le abucheaban. «Le pedimos al alcalde de Málaga que le pida explicaciones al alcalde de Madrid y que le haga llegar el disgusto y malestar de la población malagueña», decía en un tono conciliador Ramos. Antes había hecho una alegato en contra de la calle la Asociación Cultural Memorialista 'La Desbandá', que demandaba que la vía se llamara de nuevo 'Barco Sinaia', el nombre que se le puso durante el mandato de Manuela Carmena, porque había sido un buque mejicano que salvó muchas vidas, exiliados republicanos (que partieron al país sudamericano en mayo de 1939 desde el puerto francés de Sete).

Finalmente, se votaban las dos mociones y el PP, Cs y el edil no adscrito Juan Cassá lo hacían en contra de que el Ayuntamiento de Málaga le pida al Ayuntamiento de Madrid que no renombre la calle de Vallecas como Crucero Baleares y que el alcalde de Málaga lo haga formalmente. Tampoco salió adelante la reprobación del Ayuntamiento de Madrid y como gran novedad en este asunto, el PP, Cs y el no adscrito también han votado en contra de cumplir la Ley de Memoria Histórica y cambiar los nombres de las avenidas Capitán Haya y García Morato (tal y como se aprobó en el pleno de diciembre de 2017), lo que ha quedado claro por parte del equipo de gobierno del PP y Cs como toda una declaración de intenciones.