De la Torre: «Debemos reflexionar sobre cómo brindar a los andaluces la mejor educación»

El acto del Día de Andalucía, junto al monumento de Blas Infante, al inicio de la calle Cuarteles, empezaba con un anuncio por parte del alcalde Francisco de la Torre, que media hora más tarde cambiaba de rumbo. Se refería De la Torre a que el acto, que actualmente se circunscribe a una pequeña raqueta del tráfico, donde está la escultura del ensayista y político andaluz, sería el próximo año (da por hecho de que va a volver a ser alcalde tras las municipales del 28 de mayo) en los jardines de la Aurora, o más conocidos como los jardines de Picasso, donde se llevaría el alto mástil en el que se dispone la bandera andaluza, así como el tótem cuadrado de piedra en el que está esculpida la cara del llamado padre de la patria andaluza. Pero terminado el acto, un grupo de mujeres de El Perchel le reclamaba que ya habían hecho suyo ese monumento frente al antiguo edificio de Correos y que no se lo llevara de allí. Así, que sobre la marcha, y después «de oír al pueblo», como dijo, el primer edil subrayó que entonces lo dejará donde está y que el acto pasará a los jardines de Picasso, con la bandera andaluza, y también podría ponerse alguna placa en honor a Blas Infante. Pero sus declaraciones fueron así, de ida y vuelta.

Durante el acto, en el que el periodista Ignacio Martínez, hizo un repaso de la historia andaluza, de los retos y debilidades de la región, ante las autoridades de la ciudad, tanto civiles como militares y parte del cuerpo consular, De la Torre volvió a incidir en su tema estrella, con el que acaba buena parte de sus alocuciones, que no es otro que la educación. De esta forma dijo que en Andalucía hay 8,5 millones de habitantes, la región más poblada de España, y la segunda en superficie tras Castilla y Léon, y que tocaba «reflexionar sobre cómo brindar a ese capital humano la mejor educación, ya que la educación es la clave del progreso de los territorios», decía, dando cuenta que los países que más dedican a la educación son los que más progreso tienen. «Tendremos un gran futuro si nos comprometemos todos a dar la mejor educación a los niños y a los jóvenes de nuestra tierra», subrayó en un momento en el que se quedó sin altavoz porque se fue la luz de la instalación que le habían dispuesto en la calle, y se subió a un tono mitinero, con eso de que ahora están los munícipes en la precampaña municipal. Noventa días quedan para las municipales, que refería después del acto el portavoz socialista y candidato a la Alcaldía de Málaga, Dani Pérez.

Antes de la ofrenda floral, que se dispuso junto al monumento, De la Torre daba la palabra al periodista Ignacio Martínez para que diera su visión libre sobre la comunidad autónoma. Martínez dio en el clavo con su frase inicial: «Hay muchas Andalucías y mi deseo es que no sólo se miren unas a otras con buenos ojos en el día de hoy, sino que lo hagan todo el año. Cosa que desgraciadamente no siempre ocurre», por lo que afirmó que había titulado su pequeño discurso como 'Mirarse con buenos ojos«. Recordó cómo el día de Andalucía es una fiesta que crece con los años a partir de una efeméride: el referéndum de 1980 para conseguir la autonomía plena. Hizo un repaso por la historia de la región recordando cuando Gala dijo que quién se había atrevido a llamar vieja a Castilla porque »el pueblo andaluz es el más antiguo del Mediterráneo, más aún que el romano y que el griego«, y que Blas Infante se remontaba a Tartesia para datar el inicio del pueblo andaluz.

Ya de tiempos más actuales, Martínez dijo que el PIB andaluz se había multiplicado por 5,5 pero que el español también, y que la realidad era que los andaluces seguimos en el 75% de la renta nacional y que formamos una de las cinco regiones con más paro de la UE. Lo hilvanaba afirmando que estamos «lejos de ser aquella Andalucía, culta, industriosa y feliz que Blas Infante soñaba que iba a imponer el encanto de su genio. Pero es verdad que también tenemos grandes recursos humanos, naturales, culturales y tecnológicos». En el ámbito empresarial, puntualizó que había muy buenas empresas pero pocas, y cito las más importantes de cada provincia e hizo un repaso por los personajes ilustres de la región, a los que sumó a Blas Infante, malagueño de Casares, al que su vida le llevó a Granada «a licenciarse en Derecho, donde estudió como libre oyente y se pagó los estudios». De ahí pasó a hablar de la centralidad que tiene Málaga dentro de la región, para acabar diciendo que la variedad en Andalucía es justamente la riqueza. «De ahí mis deseos de que la vitalidad de Andalucía, la fuerza de su cultura, de sus tradiciones, de su capital humano, tecnológico y físico se multipliquen con la cooperación y especialización de los territorios», añadió. Al acto asistieron ediles de todos grupos municipales del Ayuntamiento de Málaga, PP, PSOE y Ciudadanos, a excepción de Unidas Podemos; el subdelegado del Gobierno, Javier Salas; y el delegado de Economía, Carlos García; autoridades militares y civiles, cónsules y el director de SUR, Manuel Castillo.

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