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El último pleno ordinario del curso político abordará cuestiones variadas, desde las internacionales, para sacar a colación la situación que hay en Cuba, de la que la coalición de Podemos e IU ya se ha posicionado en contra diciendo que no es una dictadura, cuestiones de financiación municipal a través del Gobierno y la Junta y el posicionamiento de los grupos municipales sobre el Plan Litoral y una consulta popular sobre el mismo, pero por encima de todas las cosas volverá a sobrevolar el posicionamiento de voto del edil no adscrito Juan Cassá, del que todavía nadie, incluido el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, sabe qué va a pasar mañana, como ha dicho. No obstante, De la Torre sí que quiso hacer saber que sí está preocupado por la gobernabilidad tras el desmarque de Cassá en votando en contra del PP y a favor de la oposición en las pasadas comisiones de pleno, de forma que contesta así al portavoz socialista Dani Pérez, que indicaba ayer que sería «insensato» de no estarlo.
De la Torre fue más allá, y a preguntas de este periódico, explicó que seguía confiando en la lealtad de Cassá, incidiendo en que lo que quería el concejal era que se le dieran explicaciones sobre los asuntos a tratar, cosa que harán esta tarde con las cuestiones del pleno, por lo que aún no saben qué va a votar. De hecho, De la Torre explicó que la llamó el pasado sábado para darle cuentas del centro de oficinas del puerto, del que el asturiano votó en contra, y dijo que había coincidido con él en que tenían que tener una comunicación más frecuente y más fluida. El regidor no dudó en hurgar en el periodo en el que Cassá dejó a Ciudadanos (mayo 2020) y tuvo reuniones «con el grupo socialista, y Adelante, en el caso del Ayuntamiento y la Diputación» en los que hubo contactos, reflexiones e invitaciones, como dijo, y «él (Cassá) en todo momento ha mantenido su compromiso con su electorado». «Tengo gran confianza en la lealtad de Cassá», puntualizó.
En cuanto a la gobernabilidad dijo que el PP no sólo quiere contar con los votos de Cs y del concejal no adscrito sino que estaban abiertos al diálogo con los grupos de la oposición. «Lógicamente, claro que me preocupo por la gobernabilidad», le contestó al grupo socialista.
Una de las mociones en la que coinciden los socios de gobierno, PP y Ciudadanos, es en la actual situación en Cuba, cuyos textos piden una condena a la represión en la isla caribeña, así como instar al Gobierno de España a que declare al régimen cubano como dictatorial, un asunto que lleva dando vueltas desde hace semanas en el ámbito nacional por declaraciones de dirigentes de Unidas Podemos en contra de llamar dictadura a Cuba, una reflexión que ayer se vio refrendada por la coalición de Podemos e IU (Adelante Málaga), cuya viceportavoz, Remedios Ramos, ha dicho a boca llena que claro que Cuba no es una dictadura, indicando que votaron su Constitución, pero añadiendo que había mucho bulo sobre los encarcelamientos de periodistas, cuando le hacían la pregunta al respecto, matizando que en cualquier caso condenaban la vulneración de los derechos humanos. «En Cuba no hay dictadura, en Cuba se vota», subrayó para pasar a decir que lo que hay que hacer es condenar el «brutal bloqueo» de Estados Unidos a Cuba, indicando que lo que las actuales movilizaciones en Cuba eran «una intentona golpista y desestabilizadora».
Precisamente, Podemos e IU llevan al pleno como moción urgente que el «Plan Málaga Litoral» que días pasados ha estado presentado el alcalde de Málaga, para que se paralice su tramitación hasta que se desarrolle un amplio proceso participativo para la recogida de opiniones, propuestas y la búsqueda de consenso entre el equipo de gobierno y los grupos políticos así como los agentes vecinales. La portavoz de Adelante, Paqui Macías, subrayó que el plan estaba cuantificado en 441 millones de euros «de momento» porque estas obras suelen costar más al final, e indicó que desde su grupo consideraban que «el proyecto era innecesario y costoso» y que hipotecaría las cuentas del Ayuntamiento, cuando hay otras cuestiones pendientes en la ciudad, que mejorarían la vida de los malagueños y de los barrios. Ramos lo tildó de «proyecto faraónico», e indicó que el Ayuntamiento carece de esos fondos, a lo que más tarde De la Torre puntualizó que no sólo serían fondos municipales sino de la Junta, del Gobierno y de la UE, explicando que no están de acuerdo con paralizar el proyecto.
Tanto el PP como el PSOE llevarán asuntos al pleno sobre cuestiones de financiación municipal, como ya explicó ayer este periódico, así que el PP exigirá la condonación de la deuda de los tributos transferidos por el Estado a través de la PIE de 2020, que se inflaron con 39 millones, una cuestión con la que el PSOE ya dicho que está en contra puesto que es un dinero que hay que devolver. El portavoz socialista Dani Pérez presentó como contrapartida otra iniciativa acerca de la falta de financiación autonómica en Málaga, en la que incluye en el primer punto, precisamente, que la Junta se haga cargo de las citadas devoluciones, que en el caso del Ayuntamiento de Málaga serían exactamente de 39 millones al Gobierno. Otro asunto que tampoco termina de ver el alcalde Francisco de la Torre. Pérez subrayó que de los fondos incondicionales para la época Covid que recibió la Junta en 2020 hubo un superávit y que le parecía «insolidario» que Juanma Moreno se quedara el dinero, por lo que pidió la descentralización y que los fondos lleguen al Ayuntamiento de Málaga para atender competencias impropias que asume como la vacunación en el Palacio de Ferias o el gasto en horas extra Policía Local para mantener las playas cerradas por la noche. En esta línea, Pérez pidio que se cree un consejo municipal de la Junta de Andalucía y los ayuntamientos como el Consejo Interterritorial del Gobieno y las comunidades autónomas.
Por otra parte, Ciudadanos eleva una propuesta para que se finalicen dos obras estratégicas como son el acceso Norte al aeropuerto, «de una ciudad que recibe más de 20 millones de viajeros», como subrayó su portavoz Noelia Losada, así como que se soterre el ferrocaril del puerto entre la estación María Zambrano y el puerto. El PP también presenta otra iniciativa ordinaria de infraestructuras para que se mejore el enlace de la AP-46 con la MA-20, conexiones viarias en el noroeste de Málaga.
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