Una acción de matrícula

El individuo se abalanzó sobre agente, y éste tuvo que darle un empujón para quitárselo de encima, momento en el que se volvió a abalanzar y finalmente consiguió reducirlo en el suelo, como explica. En este momento llegaba uno de los escoltas del alcalde, Miguel J. G. (que pide preservar su identidad), que ayudó a su compañero a colocar al detenido boca abajo para inmovilizarlo con los grilletes.

Todo pasó en un corto espacio de tiempo, pero Sergio lo cuenta acelerado porque el hombre que atacaba, explica, lo hacía con mucha violencia, y la situación fue tremendamente estresante.

Cuando todo acabó, el señor mayor felicitó a Sergio, y ambos se dieron cuenta de que el policía local se había cortado, en el forcejeo, el dedo corazón de la mano derecha con alguna hebilla u otro artefacto que llevara el atacante. La cosa se puso más fea cuando la analítica del detenido dio positivo en VIH. Lo siguiente fue hacerle un análisis al policía local, que ha dado negativo, pero que sólo tendrá los resultados fehacientes dentro de seis meses. Actualmente sigue de baja por un esguince con inflamación en la muñeca.

Cuando el agente volvió a la Casona tras el incidente, el edil de Seguridad, Avelino Barrionuevo, ya había sido informado y le felicitó antes de que se marchara a la Comisaría para colaborar en la realización del atestado. El grupo socialista se había enterado de lo ocurrido, de forma que el edil Salvador Trujillo presentó el pasado lunes un ruego en la comisión de Seguridad para que el jefe de la Policía Local, Fernando Cerezo, felicitara al agente, que se encuentra en segunda actividad, que suele ser administrativa, pero en el caso de los que lo hacen en la Casona va más allá, ya que conlleva todo el control y vigilancia del edificio. «Queremos poner en valor esta acción concreta y a la vez destacar la labor realizada por los funcionarios de policía local en segunda actividad que, como se demuestra, siguen llevando en su corazón el amor profundo a su profesión aunque diariamente desarrollen otro tipo de trabajo diferente al diario de la Policía Local no por ello dejan de tener ese sentimiento y vocación que juraron y que es servir y proteger la ley», rezaba en la petición del grupo socialista.

Al día siguiente de este servicio de matrícula se celebraba el juicio rápido, que se pospuso ya que la abogada defensora del detenido pidió un examen psíquico del mismo. Allí estaba el señor de 71 años al que Sergio socorrió, que se acercó, afectuoso, a darle un abrazo muy sentido. A veces las mejores medallas son las que dan con sus gestos las personas agradecidas. Hay abrazos que valen su cariño en oro.