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Ana Pérez-Bryan
Domingo, 18 de diciembre 2016, 00:35
No hay que irse muy lejos en el calendario para recordar el último escándalo de un famoso que combine imagen inapropiada, menor y red social. A esta combinación peligrosa jugó hace unas semanas la cantante Rihanna, que compartía en su cuenta de Instagram una fotografía con su sobrina pequeña Majesty con el pie de foto «Incondicional». Hasta ahí, todo normal. Lo polémico fue que ambas estuvieran desnudas, sobre todo la niña, a la que se le veía claramente a la hora del baño, y que se estuvieran dando un beso en los labios. La instantánea voló por las redes y hoy acumula más de un millón y medios de likes y 13.000 comentarios de todo tipo, entre ellos que la imagen roza la pornografía infantil.
Tampoco han estado exentas de polémica otras celebrities como Kim Kardashian, que hasta que sufrió el atraco en París colgaba el minuto a minuto de su vida y la de su hija en redes sociales.
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