Ciudadanos saca al alcalde el compromiso de convertir Gibralfaro en un gran parque

Ciudadanos es consciente de que tiene una posición privilegiada en el Ayuntamiento de Málaga a la hora de ejercer de llave entre el equipo de gobierno del PP y los grupos de izquierdas en la oposición. Y bien que sabe aprovecharlo, y venderlo, cada vez que el alcalde necesita el apoyo de sus tres concejales para sacar adelante algún proyecto o actuación de calado. «Habilidad negociadora», según palabras de su portavoz Juan Cassá. El último ejemplo tuvo lugar ayer durante la firma del acuerdo que ambos grupos políticos han alcanzado para aprobar dos modificaciones presupuestarias por 78,7 millones de euros (el 11% de los recursos municipales anuales) y un plan económico-financiero que el Consistorio tiene que poner en marcha para cumplir la regla de gasto tanto de este año como del próximo.

Al margen de que fuera la formación naranja y no el gobierno local la que convocara a la prensa para dar a conocer este acuerdo con la presencia de Francisco de la Torre, el fondo de la cuestión es que Ciudadanos ha conseguido sacarle al regidor el compromiso de impulsar de una vez por todas dos proyectos que llevan años aparcados: la puesta en valor del monte Gibralfaro convirtiéndolo en un gran parque -precisamente una de los proyectos estrella del PP desde hace una década- y la remodelación del paseo marítimo de Pedregalejo.

Un compromiso que deberá quedar refrendado en los presupuestos de 2017, tal y como recoge el documento, que incluye hasta 26 actuaciones en los barrios y en materia medioambiental con un coste de 11,3 millones. La mayor parte de estas medidas se financiarán a través de las dos modificaciones de crédito aprobadas ayer y del presupuesto de este año, pero también deja el camino hecho para que en las cuentas de 2017 se incluya una partida de cinco millones de euros para empezar a ejecutar la primera fase del plan para abrir el monte Gibralfaro a los malagueños, valorada en 15,5 millones y que contempla la conexión con el Monte Victoria mediante un falso túnel en un extremo de la calle Ferrándiz y la creación de un trazado de senderos peatonales, para bicicletas, zonas de estancia y miradores.

Paseo marítimo

De forma paralela, el acuerdo PP-Ciudadanos establece que antes de que acabe el año deberá estar redactado el proyecto para remodelar los paseos marítimos de Pedregalejo y El Palo. En cuanto a 2017, en las cuentas se plasmará esta inversión, aunque más de forma simbólica porque la intención del Consistorio es buscar financiación del Estado o de la Junta de Andalucía a través del Plan Qualifica para la modernización de zonas turísticas.

«Se trata de aprovechar bien el remanente del año 2015 dando respuesta a los temas que la cuidad tiene en política social, ambiental y en los distritos, además se ir sentando las bases para las inversiones de 2017», afirmaba Francisco de la Torre antes de entrar en el Salón de Plenos para dar inicio a la sesión extraordinaria en la que, gracias al apoyo de Ciudadanos (y también del PSOE en la modificación que incluye obras en los distritos) salieron adelante ambos cambios en el presupuesto de este año, entre los que destacan los 38,4 millones que se destinarán a la reducción y refinanciación de préstamos bancarios; 17,6 millones para equilibrar las cuentas de Limasa ante la próxima liquidación de la empresa mixta en abril de 2017; 13 millones para la renovación urbana en los distritos; y otros 6 que recibirá Emasa para ampliar la red de baldeo y mejorar la de saneamiento.

Por su parte, Cassá sacó pecho de esa «habilidad negociadora y lealtad a la ciudad» de Ciudadanos para conseguir que se incluyan 26 medidas «con el ADN naranja», poniendo a su formación de ejemplo para el resto de grupos políticos y posicionándose como «un partido responsable que, frente a los del 'no' permanente que anteponen sus siglas al interés de la ciudad, sabe que tiene que estar al lado del equipo de gobierno en asuntos importantes como estas modificaciones presupuestarias para que la ciudad no se quede parada».

Oposición

Ya en el Salón de Plenos, en el PSOE también tiraron del «somos responsables» para apoyar la modificación presupuestaria que incluye las actuaciones en los distritos y abstenerse en el plan económico-financiero, aunque María Gámez sí que criticó que «se empiece ahora a invertir lo que podría haberse hecho desde comienzos de año, y encima con dinero que tampoco se invirtió en 2015».

Desde Málaga Ahora (abstención para las obras en los barrios y el plan económico; y rechazo a la modificación para refinanciar la deuda), Ysabel Torralbo echó en falta más inversión en materia de políticas sociales y cultura. Por último, en IU-Málaga para la Gente (rechazo a las dos modificaciones y abstención en el plan financiero) lamentó la «mala gestión, improvisación y falta de proyectos de ciudad que evidencia el PP», y lanzó un mensaje a Ciudadanos apuntando que «lejos de ser una posición responsable, son corresponsables».