La reunión contra el tranvía en Eugenio Gross se cierra sin concretar movilizaciones

La esperada reunión de vecinos y comerciantes opuestos al tranvía en Eugenio Gross sirvió para poner de manifiesto una vez más la firme oposición de una parte de los residentes del distrito Bailén-Miraflores a esta infraestructura. En cambio, el encuentro se cerró sin concretar movilizaciones de protesta por parte del medio centenar de congregados ayer en el centro social de Carranque.

La cita, convocada por la plataforma No al tranvía al Hospital Civil, sí al metro al PTA y Campanillas (una de las dos creadas en el distrito contra este proyecto), pretendía ser, según explicó Francisco Fernández, coordinador del colectivo, un punto de encuentro para que los partidos políticos y los representantes de las administraciones implicadas clarificaran su postura. En cambio, a nivel institucional sólo acudieron la concejala de Movilidad, Elvira Maeso; y el concejal de Ciudadanos, Alejandro Carballo. También participaron miembros de Podemos y de Equo. Pero no acudió ningún representante del resto de partidos (se esperaba sobre todo al PSOE, por ser la formación de gobierno en la Junta), de los sindicatos ni del propio Ejecutivo andaluz, que también estaban convocados.

Fernández criticó en especial la ausencia de responsables de la Consejería de Fomento, ya que, a su juicio, esto impedía poder avanzar en el conocimiento de la iniciativa y que los vecinos pudieran trasladar sus propuestas a la Junta.

La edil de Movilidad coincidió en muchas de las dudas expresadas por los vecinos, en cuanto a los problemas de tráfico que se pueden originar y para las líneas de la EMT; y también estuvo de acuerdo en que es más prioritario llevar este medio de transporte al PTA y Campanillas, donde es «una necesidad». También respaldó la propuesta del alcalde, Francisco de la Torre, de que el tramo hasta el Civil se haga con un autobús de plataforma reservada (lo que han dado en llamar metrobus).

Por su parte, Carballo se posicionó claramente en favor de llegar al Parque Tecnológico, donde, dijo, sí hay un problema real de movilidad, que, a su juicio, no ocurre en Eugenio Gross. A su juicio, todavía es posible negociar con la concesionaria y el BEI para que la financiación se traslade a este otro tramo.

Los vecinos expresaron su inquietud por la posibilidad de que las obras comiencen de forma inminente, a lo que Maeso aclaró que todavía falta que Fomento le entregue al Ayuntamiento el proyecto constructivo. Una vez que se reciba se tendrá que analizar y Movilidad lo devolverá para que los técnicos de la Junta resuelvan las múltiples dudas que se espera que surjan.

Sobre el traído y llevado protocolo de intenciones, la edil volvió a darlo por roto, en la medida en que el Gobierno andaluz ha incumplido los acuerdos a los que se llegó, entre ellos, dijo, contar con el consenso vecinal.

La otra plataforma vecinal opuesta a esta infraestructura, bajo la denominación No al tranvía al Civil también ha hecho una convocatoria de asamblea para el próximo día 5 de abril.