Los alumnos que cursan ahora primero de Bachillerato seguirán teniendo selectividad

Si la Lomce elimina la selectividad a partir de 2017, que se sustituye por una prueba de reválida, ¿qué examen tendrá que realizar los alumnos que este curso han empezado primero de Bachillerato y, por tanto, terminan en junio de 2017 cuando, según la Lomce, ya no hay selectividad? Esta pregunta, que se han formulado muchos padres y alumnos en este comienzo de curso, pensando, cómo no, en el futuro acceso a la universidad, ya tiene respuesta, al menos en lo que respecta a Andalucía: habrá una prueba de selectividad como hasta ahora, igual para todos los estudiantes y con criterios de acceso únicos para todas las universidades andaluzas, y no las pruebas de reválida previstas en la Lomce ya para 2017 (ese primer año, válidas sólo para acceder a la universidad, pero no para obtener el título).

El nuevo ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, aceptó este verano una moratoria en la regulación de estos exámenes de reválida, en un intento de consensuar la aplicación de la Lomce. El Consejo Andaluz de Universidades (donde están representadas las diez instituciones académicas de la región así como la Consejería de Empleo e Innovación, que tiene las competencias en universidades), a través de su comisión académica, ha dado respuesta a esta nueva duda o laguna que plantea la Lomce. De esta manera, en Andalucía se va a mantener el mismo sistema que lleva funcionando años, el sistema de distrito único para el acceso a la universidad, lo que significa que cualquier alumno de la región tiene las mismas opciones de conseguir plaza en los estudios que desea, sin tener en cuenta la provincia en la que se examina.

Pero también la Lomce permite a las universidades, a partir de 2017, establecer criterios propios para el acceso de los alumnos a los estudios superiores. Pero en Andalucía habrá un único sistema de acceso a todas las universidades públicas, en lugar de que cada una establezca sus propios criterios, con el objetivo de garantizar la igualdad de oportunidades y transparencia en el acceso de los estudiantes a las enseñanzas superiores de grado y máster.

Pero la Lomce va más allá e incluso admite que se pueda examinar a los estudiantes de materias que no se han cursado. Así, la normativa, que ya ha entrado en vigor este año para los alumnos de primero de Bachillerato, permite que se valore tanto la modalidad y materias cursadas en Bachillerato, en relación con la titulación elegida, como evaluaciones específicas de conocimientos y/o competencias e incluso «otros criterios, a decisión de las universidades». En este sentido, esta misma comisión académica ha acordado que «los estudiantes no deban realizar materias adicionales a aquellas que componen el currículum de Bachillerato».

Apoyo desde la UMA

La vicerrectora de Estudiantes de la UMA, María Jesús Morales, señaló que estos acuerdos «despejan las dudas» creadas por la implantación de la Lomce en primero de Bachillerato ya este curso y, al menos en Andalucia, mantienen la «igualdad de oportunidades entre los estudiantes interesados en estudiar en alguna universidad andaluza».

Ya para el curso 2017/18 está previsto que esta evaluación final de Bachillerato a través de exámenes de reválida sí tenga efectos académicos (será necesario para obtener el título y poder seguir estudiando). Está prevista que estas pruebas finales o reválidas sean exámenes tipo test, con 350 preguntas: 200 sobre las materias troncales, 100 sobre materias optativas y 50 elegidas por el alumno.