Avalancha de malagueños que ofrecen su ayuda a los refugiados

Las llamadas telefónicas a las sedes de Cruz Roja, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Cáritas o la Coordinadora de Solidaridad con los Inmigrantes, -algunas de las asociaciones con delegación en Málaga que más directamente están trabajando en la crisis de los refugiados sirios- no cesan ni un instante. Desde hace dos semanas, han recibido una verdadera avalancha de personas que quieren ofrecer su ayuda como voluntarios, realizar donaciones económicas, de alimentos, ropa y juguetes, o para inscribirse como familias de acogida. Las dramáticas noticias sobre la situación de los refugiados sirios que intentan llegar a Europa están provocando la movilización de muchos malagueños que no quieren quedarse de brazos cruzados.

Lo mismo confirman desde la recién creada Oficina de Coordinación Municipal de Ayuda al Refugiado (Ocmar) de Málaga -situado en la antigua Tabacalera-, que empezó a funcionar el pasado lunes y donde solo en los dos primeros días se recibieron un centenar de llamadas de ciudadanos dispuestos a colaborar. Así lo explica Ruth Sarabia, directora general del Área de Derechos Sociales y Participación Ciudadana del Ayuntamiento, quien destaca la rápida respuesta solidaria de los malagueños. Entre las propuestas que han llegado a través del teléfono 010 o en el correo electrónico cooperacioninmigracion@malaga.es, han recibido el ofrecimiento de especialistas de los colegios de Psicólogos y de Trabajo Social para la atención a los refugiados, ya cuentan con un listado de 25 personas que se prestan a trabajar como intérpretes de árabe -además de la colaboración que prestará la Asociación Marroquí para la Integración de los Inmigrantes, que ha puesto a disposición de la Ocmar todos sus recursos-, media decena de personas están dispuestas a prestar sus casas vacías para acoger a las familias si los recursos institucionales o de las ONG se desbordan, e incluso se trabaja ya con una propuesta para organizar un concierto para recaudar fondos, previsto para principios de octubre.

Coordinación de los recursos

Sin embargo, desde la Ocmar y las ONG advierten de que hoy por hoy lo único que pueden hacer ante este fuerte incremento de la solidaridad es crear una base de datos de las personas interesadas en colaborar y qué tipo de ayuda podrían aportar para cuando realmente conozcan el cupo de refugiados que atenderá cada una de ellas. "La gente está muy confundida; creen que los refugiados sirios que Europa se ha comprometido a distribuir están llegando ya y lo cierto es que la UE no hace más que retrasar la decisión y cambiar las cifras", indican desde CEAR. Lo mismo señala Sarabia, quien aclara que las familias sirias que han llegado ya a través del CETI de Melilla vienen con un cupo y a recursos ya existentes, pero no tiene nada que ver con la emergencia declarada en las últimas semanas. Las últimas informaciones desde Bruselas apuntan a que los 28 aceptan acoger a 120.000 refugiados pero no terminan de elaborar un plan de reparto por países. Los datos que se barajan son todos provisionales y no existe un calendario preciso. La falta de información se cierne sobre las propias ONG que previsiblemente serán las encargadas de canalizar este apoyo directo.

Ante toda esta incertidumbre, desde Cruz Roja aseguran que ahora mismo no tienen ni infraestructura ni conocimiento del material o el número de voluntarios que van a necesitar para apoyar a las familias de refugiados que se esperan en Málaga, declarada desde esta semana 'ciudad refugio' para organizar la ayuda, una iniciativa a la que esperan sumarse otras localidades de la provincia. "Estamos trabajando en esta emergencia a través de las donaciones económicas y la campaña de este año del Día de la Banderita que se celebra el 2 de octubre va a centrarse en la crisis de los refugiados, pero no podemos recoger alimentos o ropa que mucha gente nos ofrece pero que ahora mismo no sabemos lo que vamos a necesitar", afirman desde Cruz Roja Málaga. Pese a todo, asegura que están recibiendo ofrecimientos de todo tipo, como grupos de empleados de empresas que quieren colaborar o familias que ofrecen sus viviendas para alojar a refugiados.

En CEAR Málaga han llegado incluso ciudadanos anónimos a la sede con dinero en metálico que querían donar para la crisis de los refugiados sirios. "La población está muy sensibilizada debido a la repercusión mediática que ha tenido la situación en este último mes", señalan desde la ONG. Y cualquier ayuda es bien recibida, por pequeña que sea y recuerdan que las donaciones económicas pueden ayufar desde ya no solo para atender a los refugiados que están llegando a las costas de Grecia, Italia, Macedonia, Hungría, Chipre y Malta, sino para financiar el apoyo a refugiados de cualquier zona en conflicto a las que atienden actualmente en las delegaciones provinciales como la de Málaga.

El Obispado de Málaga ha encargado a la Delegación Diocesana de Migraciones y a Cáritas Diocesana la coordinación de la ayuda que pueda ofrecerse desde la Diócesis para la acogida de los refugiados y ha destinado un número de teléfono, el 620 851 588, y un email: acogida@diocesismalaga.es, para coordinar toda la ayuda. Desde Cáritas confirman un incremento de las llamadas de fieles que ya han querido sumarse a las acciones que se realicen desde la Iglesia para esta emergencia.

Desde la Coordinadora de Solidaridad con los Inmigrantes también constatan el interés que esta crisis humanitaria ha despertado entre los malagueños. Su presidente Luis Pernía asegura que están a la espera de conocer cómo se va a realizar el reparto de refugiado "que no debería dilatarse más" y señala que es fundamental que xista una buena coordinación a nivel local para atender a estas personas. "Todas las asociaciones debemos trabajar juntas porque cuando lleguen los refugiados van a necesitar apoyo en ámbitos muy diversos, desde la vivienda y el alimento hasta la escolarización de los niños o la atención psicológica", afirma.