Muelle Uno prevé crecer en un millón de visitantes por el tirón del Pompidou

Lo que se podría denominar el efecto Pompidou ya empieza a dejarse notar en Málaga, y especialmente, en el entorno donde se ubicará el nuevo museo. No se trata ya de que el Ayuntamiento, que es promotor de la iniciativa, prevea un fuerte impacto turístico tras la inauguración del Cubo del puerto. El estudio elaborado por la sociedad Muelle Uno, concesionaria del centro comercial del puerto de Málaga, prevé que la afluencia de publico crezca en casi un millón de visitantes en los nueves meses siguientes a la inauguración (entre abril y diciembre) gracias al hito de la apertura del icono francés.

En cifras concretas, la previsión para este año es que el número de usuarios aumente en torno a un 13%, con lo que la cifra total se iría a unos 7,8 millones. El año pasado se cerró con 6.940.000, esto es, un 11% más que el anterior. Junto al atractivo evidente del equipamiento cultural, los gestores de Muelle Uno esgrimen otros alicientes, como la ampliación de la oferta comercial y de ocio y la mejora de las infraestructuras, tales como el acristalamiento de las terrazas de algunos restaurantes para que se puedan utilizar también en invierno.

Llegada de inversores

El efecto Pompidou también se traduce en un mayor interés de los inversores por instalarse lo más cerca posible del Cubo. La zona de restauración está ocupada al 100%, lo que significa que sólo se podrá instalar un bar nuevo si antes cierra otro. En cambio, la parte de tiendas tiene mucho recorrido para crecer (la ocupación general es del 70%) y, según fuentes de la compañía, desde el pasado verano han aumentado las solicitudes de marcas para instalarse, y en este ejercicio se espera duplicar el número de locales comercializados el año anterior, cuando hubo seis aperturas.

En este punto, están muy avanzadas las negociaciones con un operador que pretende combinar espectáculos flamencos, un centro de formación y una tienda gourmet, que ha solicitado tres locales (unos 850 metros cuadrados) muy cerca del futuro recinto expositivo. «Es una inyección de moral para nosotros y para el resto de locales, porque es un operador que antes no se fijaba en Muelle Uno, y ahora lo afronta como una apuesta desde el punto de vista turístico». También hay previstas próximas aperturas de tiendas de ropa; mientras que varios comerciantes del Centro se han interesado por trasladarsde a este espacio.

En el caso del polémico local de la esquina, que tras las últimas negociaciones con la Autoridad Portuaria se iba a destinar a un supermercado (tiene 1.600 metros cuadrados, lo que lo convierte en el más grande del recinto), los responsables indican que hay negociaciones abiertas con varios posibles operadores, tanto del sector de la alimentación como del ocio infantil; aunque por el momento no se ha cerrado un acuerdo. «Tenemos una mayor exigencia de calidad ahora por la presencia del Pompidou; hay varias propuestas sobre la mesa pero se miran con lupa, porque la propiedad quiere apostar por un operador de alta calidad». En este punto, se ha abierto incluso una posibilidad de ampliar la superficie, con una pequeña reforma en la esquina de la plaza. «El interés vuelve a estar ahí», afirman.

Más años de concesión

Las tiendas de moda y complementos han crecido un 10% de media en 2014 (algunas por encima del 20%); mientras que los negocios de restauración lo hicieron entre el 3 y el 4%, porque la mayoría ya están muy consolidados y partían de buenas cifras.

En este sentido, el arranque del año también ha sido positivo, después de que el último consejo de administración de 2014 en la Autoridad Portuaria autorizara una serie de compensaciones de cantidades, por las cuáles la entidad reducía sustancialmente las deudas con el organismo público. Además, se aprobó una reducción del espacio que ocupa la concesión, lo que ha supuesto una rebaja de casi 300.000 euros sobre el canon anual, que era de 1,5 millones.