Cuando el dinero es balsámico

Los focos, a veces, tienden a deslumbrar los ojos de quien contempla el brillo de los trajes de fiesta y de los rostros famosos. Sucede con los saraos benéficos que en los últimos años han hecho de Marbella el epicentro de la filantropía y que acaban de dar por finalizada la temporada en los mejores hoteles de la Costa. Y una de las citas más potentes en este escenario que reúne el fin social con el gancho del personaje conocido es la Global Gift Gala, una fiesta que organiza María Bravo y que amadrina su amiga inseparable, y centro de todos esos focos, Eva Longoria.

Desde que hace cuatro años se celebrara este encuentro internacional de captación de fondos para organizaciones benéficas de aquí y de allá, muchas han sido las ONG que han logrado un impulso extra gracias a la donación de esta fundación que preside la propia Bravo. Una de las últimas ha sido Cudeca, la fundación con sede en Benalmádena que atiende a los pacientes enfermos de cáncer en estado no curativo y a sus familias, que hace unos días convertía en una particular fiesta la visita a sus instalaciones de María Bravo y su equipo con la parte proporcional de la ayuda que les corresponde tras la gala. En total, la ONG que fundó la británica Joan Hunt en el corazón de la Costa del Sol y que cuida y acompaña a enfermos de toda la provincia ha recibido 27.336 euros, una cantidad que sin duda representa un impulso para una organización que cada vez llega a más sitios.

Allí, a pie de campo, Bravo y los suyos tuvieron la oportunidad de conocer de primera mano el Centro de Cuidados Paliativos que ha puesto en marcha Cudeca, así como sus Programas Asistenciales gratuitos, en los que se incluye la Atención Domiciliaria, la Unidad de Ingreso y la Unidad de Día. Todos ellos recibirán el aporte extra de una gala que, una vez apagados los focos, demuestra por qué es más que una fiesta.