«Los mejores helados no son los italianos»

El negocio de las heladerías ha florecido como pocos en Málaga en los últimos años, sin embargo no todos los establecimientos fabrican los helados del mismo modo, y eso se nota. Rosa Chicón, una de las heladeras más veteranas de la capital, con treinta años ya de trayectoria como mujer empresaria, defiende la forma artesana de elaborar el producto frente a otros modos tal vez más rentables pero no iguales a la hora de saborearlo.

¿Cómo debe ser un buen helado?

Tiene que hacerse con productos de primera calidad y a conciencia. Los helados modernos de ahora son muy bonitos sí, pero en realidad todos parten de una misma base a la que le echan diferentes concentrados para darle el sabor. Nosotros hacemos helado de, no helado con sabor a. Helados de sabores se pueden hacer todos los que se quieran porque hay mucha materia prima sintética, pero no es lo mismo.

¿Y una buena granizada?

Todo lo que se salga de lo normal es artificial. Yo tengo solo de limón, de café y de descafeinado. En las demás no creo.

Y cuando se venden granizadas de sandía, de fresa o de manzana... ¿no llevan esas frutas?

No. Llevarán concentrados de todas esas cosas, pero no la fruta. Donde digan que es natural es falso, lo sé porque he ido a muchos cursos.

Hay a quien le da dolor de cabeza sorber el hielo triturado. ¿Hay algún remedio para eso?

Tomarse la granizada más despacio, no queda otra. Y si da el dolor, parar. Algún cliente alguna vez me lo ha comentado y le dicho que lo mejor era que parara. Me da miedo, aunque me pasa muy poco.

¿Tarrina o cucurucho?

Se venden más tarrinas.

¿Es Málaga una buena tierra heladera?

No.

¿Por qué?

Hay muchas heladerías pero hacen un producto para salir del paso. Helado hace mucha gente, pero un buen helado, muy pocos.

¿Qué tienen los helados italianos para que se quieran imitar?

Mucho aire y una presentación muy llamativa en las vitrinas. Puede que sean los que mejor se enseñan al público, pero no son los mejores. Bajo mi punto de vista, les ganan los valencianos. Son más artesanos y están más trabajados. La tradición heladera se extendió desde Valencia al resto de España, incluida Málaga.

¿Cabe todo el mundo de los sabores? Lo digo por aquello del helado de tortilla de patatas o de boquerones en vinagre.

Cabe todo, pero nadie inventa nada. Basta con coger una base y echarle un concentrado de algo por encima. Se pueden hacer helados casi de cualquier cosa, pero luego tienes que creer en ellos o no. Yo, por ejemplo, no creo en un helado de un determinado dulce que consista en una base blanca con trozos de ese dulce por encima.

Lo más raro que le hayan pedido...

Pues hace poco me pidieron un blanco y negro con helado de Málaga. En ocasiones advierto a algunos clientes de que lo que me piden no pega, pero me insisten.

¿Algún cliente famoso?

Dani Rovira y la cantante de El Sueño de Morfeo, entre otros.

¿Qué es lo que más le gusta de la zona de Fuente Olletas?

Que es un barrio muy familiar y con mucha seguridad.

Algo con lo que se derrita.

Con mi trabajo, que me ilusiona.

Algo que le congele el corazón.

La impotencia cuando veo en la televisión las crueldades de la guerra y la corrupción de los políticos.