Paga una comida con un décimo que resulta agraciado con un quinto premio

En el caso de Ana y Orkhan, el décimo premiado había sido un regalo de la lotera, amiga íntima de ambos, durante un almuerzo en el restaurante de la pareja. Pero además, Victoria Ríos había vendido 150 décimos, lo que supone repartir 900.000 euros en premios. «Se lo hemos vendido a gente del pueblo y a muchos turistas españoles este verano», explica mientras subraya que algún décimo ha ido también a una administración de loterías de Málaga, en Bahía Málaga. «Me he alegrado mucho del premio, sobre todo este año tan malo, en el que además las ventas han bajado más de un treinta por ciento, pero algo es algo», contaba la lotera, visiblemente emocionada.

También Juan Antonio y Ana (tío y sobrina) disfrutaban este mediodía en la puerta de la administración de lotería. A cada uno de ellos les ha tocado un décimo premiado con 6.000 euros, aunque reconocían que no eran los únicos de su familia. «Esto llega en el mejor momento, alguno se ha quedado en paro en un año muy complicado», afirmaba él con una sonrisa de oreja a oreja mientras mostraba orgulloso su décimo.