Von der Leyen apremia a Johnson a presentar comisario para el Ejecutivo de Bruselas

La futura presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen ha requerido este miércoles por carta a Boris Johnson que nomine «rápido, lo antes posible» al candidato que representará a Reino Unido en el Ejecutivo comunitario hasta el 31 de enero, la nueva fecha de referencia para el Brexit. En la misiva se invita al 'premier' a proponer el nombre de una mujer. Así que no solo se apremia a Londres a dar una respuesta, sino que se le alienta a tener un gesto que permita a la alemana cumplir con el compromiso de diseñar un equipo de 'ministros' paritario.

A lo primero (la urgencia) Jonhson está obligado. No le quedó más remedio que aceptar que los británicos tengan los próximos tres meses representación en el Gobierno de Bruselas. Era una condición básica para que se otorgase la nueva prórroga al divorcio. Y debe dar el paso en días porque el o la elegida deberían examinarse a partir de la próxima semana ante una comisión parlamentaria como paso previo para que el equipo al completo de comisarios pueda ser ratificado en un pleno en la Eurocámara «a finales de este mes», confirmó una portavoz de Von der Leyen. Quiere arrancar su mandato el 1 de diciembre. Ya lleva un mes de retraso.

«Se ha invitado al primer ministro a que proponga varios nombres, también candidatas» porque las cuentas ya no le salen a la germana. Francia, Hungría y Rumanía fracasaron ante los eurodiputados con sus propuestas iniciales. Y las alternativas presentadas descuadran su compromiso de alcanzar la igualdad. El francés Emmanuel Macron ha sustituido a su apuesta inicial, la ex ministra Sylvie Goulard, con el empresario Thierry Breton. Rumanía, que sufrió el veto por conflicto de intereses de Rovana Plumb, le ha presentado dos alternativas, hombre y mujer, Siegfried Muresan y Adina Ioana Valean. Y Hungría propone otro varón; Olivér Varhélyi, su hasta ahora embajador permanente en Bruselas.

Hoy, a la espera de Reino Unido, la diferencia sería de 12 mujeres -con la propia presidenta y si finalmente ésta elige a la nominada rumana- frente a 15 hombres. La paridad plena es complicada porque Macron (humillado con el descarte) difícilmente dará marcha atrás. Y, a priori, tampoco lo hará la Hungría de Viktor Orban. Rumanía, al plantearle a primera hora de la tarde las dos opciones para que elija, da un respiro a la alemana.

Bucarest, con nuevo ejecutivo desde el lunes, ya había pinchado dos veces. La primera, ante el Parlamento. Y la segunda el pasado 29 de octubre cuando la propia Von der Leyen dijo no a su 'opción B' (Victor Negrescu, exministro de Asuntos Europeos y antiguo eurodiputado) porque el gobierno socialista de aquel país estaba en funciones e incurría en «falta de legitimidad».

Reino Unido y un último gesto del histriónico Johnson, volcado ya en la campaña para las elecciones del 12 de diciembre, es ahora su última opción para avanzar en ese equipo igualitario que prometió al Parlamento Europeo. Por dónde pueda salir el 'premier' es una incógnita. Pero por si acaso, la portavoz comunitaria Dana Spinant, ya ha hecho hincapié en que la futura líder de la UE «ha conseguido ya la mayor presencia de mujeres en la historia de la Comisión Europea».

Algo que puede ser insuficiente para algunas familias políticas claves en la Eurocámara. Sin ir más lejos, la segunda con mayor peso, el Grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas. Su jefa, la española Iratxe García, ha venido insistiendo en que la paridad era una condición fundamental para prestar su apoyo al futuro Ejecutivo comunitario. «Somos la mitad de Europa y queremos estar en la misma proporción en la Comisión Europea», ha dicho en varias ocasiones.