«Si ese potente misil hubiera caído en el restaurante nadie se habría salvado»

El proyectil impactó de lleno en la cocina de un restaurante local en el que trabajaba la entidad. El edificio quedó «totalmente destruido», declaró el cocinero, que se encuentra actualmente en Ucrania. A pesar del shock que viven día a día tantos estos voluntarios humanitarios como los civiles y los soldados que defienden el país de los invasores, los miembros de este equipo, que trabajan en la ONG desde hace semanas, «se encuentran bien», afirmó el chef, y han decidido quedarse «para seguir cocinando en otro emplazamiento».

De esa manera, los trabajadores de la World Central Kitchen vuelven a entregarse a fondo en su labor humanitaria, entre ayer y hoy, en una nueva ubicación de Járkov, especificó José Andrés. Su ONG tiene dispersas por Ucrania y otros países limítrofes más de 300 cocinas para ayudar a la población. «Intentamos tener a los equipos muy seguros, pero la gente tiene que seguir comiendo», explicó el chef. Y lo hacen en «zonas muy pobres donde no hay supermercados o en los búnkeres».

Es la primera vez que esta misión humanitaria recibe un golpe como este desde que lleva a cabo su labor en Ucrania. «Esta es la realidad aquí: cocinar es un acto heroico de valentía», afirmó el director del proyecto, Nate Mook, en un vídeo donde aparece rodeado de escombros delante del edificio impactado por el misil ruso y que quedó totalmente destrozado. «Una tremenda cantidad de destrucción sin motivo alguno», lamentó.

El fundador de la ONG, que desarrolla la misión desde casi el inicio de la invasión de manera presencial, se encontraba en Chernígov cuando tuvo noticia de lo ocurrido. Lamentó la «matanza» provocada por la ofensiva de las tropas del Kremlin y señaló en su cuenta de Twitter que «los ataques rusos contra edificios civiles, mercados, iglesias, etcétera, deben terminar».

Aprovechando la ocasión, también quiso enviar un mensaje al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y al líder de la oposición del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, a quienes pidió una respuesta «bipartidista» contra la guerra. «La gente de Ucrania se merece nuestro respeto y admiración», señaló.

World Central Kitchen se dedica a preparar comidas a los ucranianos que viven en zonas liberadas de la invasión rusa, así como en los pasos fronterizos hacia los territorios que se encuentran al oeste del país. ¿Cómo es vivir y trabajar en medio de una guerra? «Me concentro en dar de comer, pero a veces no puedes escapar de las realidades. El espíritu de la gente de Ucrania es increíble», expresó el cocinero, quien a pesar de encontrarse en una zona tranquila en el norte del país, aún escucha los bombardeos.

Por otra parte, José Andrés hizo hincapié en la admiración que ha logrado el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, desde el inicio de la invasión. «Mucha gente te dice que no le votó, pero que ahora es su líder. Y no podemos dejar que esta guerra la jueguen solo los ucranianos. Los países democráticos tenemos que estar con el presidente Zelenski y con los ucranianos», advirtió el chef.