Ucrania flaquea en Kursk a la espera de la respuesta de Moscú a la tregua de 30 días

Cerca de allí, otra compatriota, Daryna Smilyanets, se muestra esperanzada. «Intento resistir, creer en lo mejor», dijo. «Quiero que todo esto valga la pena y que termine, que todos regresen. Que los que están en cautiverio, que los que luchan, todos vuelvan a casa con vida».

Todo ello mientras se complica la situación para Volodímir Zelenski en la región rusa de Kursk, invadida por las tropas ucranianas en agosto de 2024 y cuyo territorio pretendía usar como «moneda de cambio» en unas eventuales negociaciones de paz con Rusia.

Hace ocho meses las fuerzas de Kiev lanzaron una sorpresiva operación que supuso la primera invasión de territorio ruso desde la segunda guerra mundial y se hicieron con el control de 1.400 kilómetros cuadrados. Este miércoles el ministerio de Defensa ruso ha anunciado que han tomado cinco localidades en esta zona, lo que para el Kremlin demuestra que «la dinámica es positiva». En los últimos diez días Ucrania ha perdido cerca de 200 kilómetros cuadrados de este territorio, lo que ha forzado al cese del jefe del mando del norte del ejército, Dmitró Krasílnikov. El general, en declaraciones a la televisión pública ucraniana, confirmaba su destitución pero aseguraba que no se le había explicado el motivo de la decisión.

Los medios estatales rusos difunden imágenes de soldados agachados y embarradados deslizándose a través de un gaseoducto para atacar la retaguardia ucraniana. «El enemigo se bate en retirada con pánico y desorden. Es un hundimiento», asegura en la televisión rusa un militar con el nombre de guerra 'Zombie', el comandante responsable del ataque perpetrado por 800 hombres. Esta rendición se ve reflejada con vídeos compartidos en las redes sociales que muestran las huidas a la carrera entre las filas ucranianas.

Como respuesta, al menos cuatro trabajadores rusos, tres hombres y una mujer, han perdido la vida y otros dos han resultado heridos en una contraofensiva ucraniana contra una fábrica de pienso para animales en Kursk registrada la mañana de este miércoles.

Los avances de las tropas de Moscú hacen temer una pronta retirada. A mediados de febrero, Ucrania afirmaba controlar 500 kilómetros cuadrados en Kursk frente a los 1.400 al inicio de su ofensiva. Ahora el territorio en su poder se habría reducido hasta los 300, según el Ministerio de Defensa británico. Según el Kremlin, las tropas ucranianas han sufrido 260 bajas durante las últimas 24 horas, entre muertos y heridos, lo que eleva a 66.810 el total de bajas sufridas por Kiev desde el inicio de la incursión. El Gobierno de Zelenski de momento guarda silencio ante estas informaciones.

En otros frentes de este conflicto bélico, un ataque nocturno ruso con un misil balístico durante la pasada madrugada contra el puerto de Odesa, en el sur del país, dejó cuatro muertos de nacionalidad siria y un carguero con bandera de Barbados resultó dañado, según han informado las autoridades de Kiev. «En el momento del impacto, el buque estaba cargando trigo para ser exportado a Argelia. Es un barco totalmente civil», expresó Oleksiy Kuleba, viceprimer ministro de Reconstrucción, a través de las redes sociales. Asimismo, ha informado de dos heridos, un ucraniano y un sirio. Las víctimas mortales eran jóvenes, la de menor edad tenía 18 años y la mayor 24. «Rusia está atacando las infraestructuras de Ucrania, incluidos los puertos que participan en garantizar la seguridad alimentaria del mundo», ha denunciado Kuleba.

De forma paralela, el gobernador de la región de Dnipropetrovsk ha comunicado la muerte de una mujer de 47 años durante un ataque ruso con misiles contra Krivoi Roig, la ciudad natal del presidente Volodímir Zelenski. La Fuerza Aérea ucraniana ha informado de que Rusia ha lanzado la pasada noche tres proyectiles contra territorio ucraniano, así como 133 drones de diversos tipos tipos, 98 de los cuales fueron derribados por las defensas de Kiev. Estas acciones de Moscú se han registrado horas después de que Ucrania respalde la propuesta de Washington de un alto el fuego de 30 días y acepte entablar negociaciones con Rusia de forma inmediata.

Un acuerdo que ya se está notando en el frente. Polonia ha confirmado la reanudación de las entregas a Ucrania de armamento estadounidense a través de su territorio. «Confirmo que los envíos de armas a través de Jasionka han vuelto a los niveles anteriores», ha ratificado el ministro de Defensa polaco, Radoslaw Sikorski, tras reunirse este miércoles con su homólogo ucraniano, Andri Sibiga, quien ha destacado que este aeropuerto es «el mayor centro logístico» desde el que Ucrania viene recibiendo armamento. Asimismo, Kiev ha recuperado la asistencia de la inteligencia de Estados Unidos tras cumplirse las peticiones de Donald Trump en Yeda.