Una trabajadora de zona azul fue agredida este jueves por la mañana en la zona frente al Centro de Salud de Antequera de la Avenida de la Estación, tras recibir una paliza por parte de usuarios de un vehículo que se negarían a pagarle los vales de estacionamiento, según confirma el colectivo de minusválidos de Singilia Barba que regula los espacios de aparcamiento en la ciudad.
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Fue atendida en los centros sanitarios con varias contusiones y desde la misma tarde se recupera en casa de las lesiones tras pasar por el Hospital. El Ayuntamiento convoca una concentración de repulsa este viernes 18 de febrero a las 11,30 horas en la puerta principal del consistorio.
Como cada día, empezaba su jornada de trabajo en la zona azul frente al Centro de Salud. La técnico reguladora de aparcamiento se dirigiría a un coche y le pediría el pago del vale de estacionamiento, pero lo que recibió fue una paliza por parte de los ocupantes, que se marcharon sin pagar y dejándola en el sitio.
Ella intentó llamar a los compañeros de Singilia Barba ante la situación de peligro, quienes la atendieron y escucharon: «¡Me están pegando, me están pegando...!» y se cortó la llamada. Fue cuando desde la asociación de minusválidos llamaron a la Policía Local para expresar su preocupación por la llamada de la compañera.
Llegaron y ya estaba sola en el lugar, dolorida, siendo trasladada inicialmente al centro de salud donde se le realizó una primera exploración. Se decidió trasladar al Hospital Comarcal donde se le atendieron de varias contusiones, con muestras de haber sufrido en varias partes del cuerpo, así como le faltaba hasta un puñado de pelos de la cabeza que se los arrancarían en la trifulca.
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Tanto la Policía Local como la Policía Nacional no han recibido aún denuncia alguna de los hechos, esperando a recibirla para poder buscar a los presuntos agresores. Compañeros de trabajo fueron al lugar para conocer su estado y buscar el teléfono móvil que desapareció tras la llamada de alerta.
La zona azul de la Avenida de la Estación entró en funcionamiento en octubre del pasado año, siendo bien recibida por quienes acuden a las citas médicas, pero no tanto por quienes encontraban en ella un lugar donde dejar el vehículo y donde han tenido que empezar a pagar.
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Normalmente son dos técnicos de estacionamiento quienes trabajan en el lugar, pero precisamente este jueves se encontraba solo una al estar de baja la compañera.
Tras conocerse la agresión, el alcalde de la ciudad, Manuel Barón, muestra su repulsa ante los hechos acontecidos. «Mostramos, todo el Ayuntamiento, nuestra más enérgica protesta y repulsa porque no sólo se ha agredido a una trabajadora, sino a su vez a una mujer que tiene a su vez una discapacidad y que ha tenido que ser hospitalizada por las heridas causadas por el grupo de personas que le ha infringido dicha agresión».
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