Versiones contrarias en el 'caso boda' en Ronda: la ex alcaldesa dice que no sabía que se cambió la fecha del enlace y el ex edil y padre de la novia, que sí

Algo más de siete años después de que saltase a la luz pública el bautizado como 'caso boda', en Ronda, este lunes ha arrancado su juicio oral, en el que están acusados de un supuesto delito de falsificación de documento público, en concurso medial con un delito de estafa, la ex alcaldesa de Ronda María Teresa Valdenebro (PSOE); su ex edil José María Jiménez; y la hija de éste, Laura Jiménez.

Se ha investigado en el proceso si se cambió en la documentación del expediente del matrimonio, la fecha del enlace civil de la joven para que ésta pudiese acceder a un contrato laboral en el Hospital de la Serranía de Ronda, como enfermera, y disfrutar de un permiso retribuido por matrimonio en el que se fue de luna de miel a Nueva York.

Los hechos se destaparon. La boda se celebró, en la finca de los Jiménez, en el fondo del Tajo, el 17 de junio de 2017 y en los documentos correspondientes se recoge que tuvo lugar cuatro días más tarde, el 21 de junio. La ex alcaldesa fue quien ofició la boda.

Jiménez, en rueda de prensa, anunció su dimisión y reconoció que falsificó el acta «por el interés de la persona que se casa», dijo entonces, argumentando que fue una decisión de la familia, que su hija prefería el 21 para casarse, pero que al ser un día laborable, la familia no podía asistir a la celebración, por eso se ofició el 17, sábado. El ex edil exculpó entonces a la ex regidora.

Ésta ha venido defendiendo que nunca ha hecho nada para favorecer el interés particular de nadie, que no reparó en que el acta que firmó, en la boda, tenía la fecha cambiada, ya que es un documento «que no se lee nunca, ni en esa boda, ni en las demás».

En el juicio oral que arrancó este lunes, y que continuará este martes, en la Sección Segunda de la Audiencia de Málaga y tras cinco suspensiones, por distintos motivos; Jiménez declaró, según fuente cercanas, que la boda estaba prevista para el 17, pero que le llamó su hija y le dijo que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) le había ofrecido un contrato para el 21 y para que pudiera aceptar la oferta, la boda tenía que estar fechada el 21, que lo comentó con Valdenebro y que ésta le dijo que no había problema en cambiar la fecha del acta y que lo hablara con la funcionaria que llevaba el expediente, que la ex alcaldesa le dejó el acta y que la funcionaria en cuestión fue la que cambió la fecha.

Jiménez también aportó unos mensajes de WhatsApp, entre la ex alcaldesa y él, en los que se relata, según aseguraron las mismas fuentes, que un periodista de ABC quería hablar con ella sobre los hechos, antes de que se publicase la noticia, y que ésta le indica que no hagan declaraciones él, su hija y su yerno.

Valdenebro, por su parte, se mantuvo en su versión y declaró que no es cierto que Jiménez hablase con ella al respecto y tampoco que sabía que tenían interés (Jiménez y su hija) en cambiar la fecha. Volvió a reconocer que firmó el acta de celebración de la boda, el 17, y que no comprobó, como dijo, la fecha del documento.

Este lunes también declararon varios empleados municipales, como testigos, y el PP, que actúa como acusación popular.

Al ser preguntados por este periódico, Valdenebro no quiso pronunciarse al respecto y Jiménez, indicó que atenderá a los medios de comunicación «cuando todo acabe».

La Fiscalía pide seis años de cárcel para cada uno de los acusados e inhabilitación especial. Sostiene que los tres acordaron la elaboración de tres documentos «mendaces»: la solicitud de matrimonio, la carta de pago de las tasas municipales y el acta de la celebración de la boda «con ánimo de obtener un beneficio patrimonial ilícito». En los dos primeros «alteraron, por sí mismos o valiéndose de otra persona que no ha podido ser identificada, una de las firmas, que se debía corresponder con la de la alcaldesa».

El juicio oral continuará este martes, con declaraciones de testigos. Hay que recordar, por último, que Valdenero gobernaba entonces en Ronda gracias a una moción de censura que presentó el PSOE, junto al PA e IU, desbancando del sillón, en 2016, a la popular María de la Paz Fernández, que ganó las municipales del año 2015, quedando en minoría.

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