«Tenemos mucho miedo, pensábamos que esto iba un poco mejor por aquí y de repente se ha liado»

Vanessa Melgar

Viernes, 10 de septiembre 2021, 17:43 | Actualizado 17:59h.

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Los vecinos del Valle del Genal están siguiendo angustiados y minuto a minuto la evolución del incendio de Sierra Bermeja, que se originó en los términos municipales de Jubrique y Genalguacil y que en la actualidad se encuentra descontrolado. Los ayuntamientos de estas localidades han comunicado los habitantes de estas dos localidades que no pueden salir de sus casas, después de que se haya ordenado el confinamiento obligatorio ante el riesgo de explosión «por el tipo de nubes y el humo», según explicó el alcalde de Jubrique, Alberto Benítez, en un audio de WhatsApp que ha difundido.

«Estamos muy preocupados, imagínate cuando tu alcalde te manda un audio así. Tenemos mucho miedo, pensábamos que esto iba un poco mejor por aquí y de repente se ha liado todo. Estamos llenos de humo, los arriates parecen que tampoco pueden echar agua por el humo», explicó Fabiola Ruiz, una vecina de Jubrique que, además, está viviendo esta situación por partida doble, ya que su pareja es trabajador del Infoca: «Entra a trabajar a las siete, me quedo sola con los niños, sin saber si nos van a evacuar o no o lo de la explosión, tenemos mucho miedo», insistió.

Recordó que la mala experiencia de este verano con el incendio que calcinó alrededor de 400 hectáreas en Jubrique, por el que el Ayuntamiento incluso llegó a poner a alerta a los vecinos, de madrugada, ante una posible evacuación del pueblo que finalmente no fue necesaria. «Hace un mes y pico pasamos por lo mismo», dijo y añadió que aún no se ha preparado para una posible evacuación.

Desde Genalguacil, Melody Melgar, una vecina, explicó: «Hasta ahora no había llegado el humo aquí, la gente está muy nerviosa», relató y destacó que se espera que pare el viento. «Solo se ve humo», manifestó y reconoció que cree que serán evacuados.

Antonio Rubio, al que casi no le salieron las palabras, mostró su preocupación: «No vemos nada, no sabemos dónde está la candela, no se ve nada, tenemos que estar con las puertas y ventanas cerradas y ya está». Juan Álvarez añadió: «Se está quemado casi todo el término... Es un desastre y muy grande», lamentó.