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La plaza de la Cultura de Pizarra alberga la Casa Consistorial del municipio desde 2010. A pocos metros de la sede municipal se ubica una ... figura con mucho pasado, conocida durante décadas como 'La Muñeca': esta estatua de metal del siglo XIX decoró una fuente pública del ensanche urbanístico del pueblo con la llegada del ferrocarril. Tras ser apartada de la zona en la que se ubicaba y guardada durante décadas por manos privadas, la figura volvió a las calles de Pizarra en 2010 tras ser donada en 2007. ¿Cuál es su historia?
El ensanche urbanístico del municipio se produjo a mediados del siglo XIX con la construcción del ferrocarril de Córdoba a Málaga (1860-1865). La estación de Pizarra entró en funcionamiento en 1863, y en ese momento se delinean cuatro manzanas sin edificar cercanas a esta zona a las afueras del pueblo, que por aquel entonces era un llano o ejido (del latín exitus, salida) donde se festejó la feria de la villa cada 15 de agosto.
Según explica el investigador local Alejandro Rosas, estos terrenos fueron adjudicados a destacados inversores malagueños: Tomás Heredia Livermore, Enrique Crooke Manescau, Eduardo Loring Oyarzábal y Clemente Hurcades Nogués. El 8 de mayo de 1863, bajo la presidencia del alcalde José de Rosas Díaz, la corporación municipal acordó la creación de una fuente pública en esta zona para favorecer su desarrollo, en la que posteriormente se ubicaría la estatua de 'La Muñeca'. Ésta fue la tercera fuente pública de Pizarra, que hasta 1863 solo contaba con la fuente de los Cuatro Caños (1515). «En ese año (1863) se inauguraron dos nuevas: la Fuentecilla del Barrio Alto y la de 'La Muñeca'», cuenta Rosas.
La figura, cuya estética «responde plenamente» al gusto decimonónico, no es una creación artística individual, según relata el investigador. «Es una pieza de fabricación industrial. En esa época había diferentes fundiciones en Europa, especialmente en Francia, donde se producían estatuas para adornar la vía pública, por lo que puede que existan otras figuras similares a ésta».
Se trata de una pieza femenina, una ninfa, que denota un claro influjo de la estatuaria clásica, con el cabello anudado en trenzas y prendido de espigas, el lazo pendiente sobre el cuello inclinado junto a un rostro de facciones finas, mirada dulce y labios sonrientes.
Con un brazo elevado y el otro con flores y espigas en la mano, su cuerpo arqueado con espalda desvestida y el abdomen ceñido por la cinta de un camafeo helenístico deja ver la túnica desdoblada en pliegues infinitos que descubren los pies descalzos. «Todo en ella evocaba la fugacidad de la belleza corpórea mediante la eternidad del arte escultórico», explica Rosas, que asegura que 'La Muñeca' es únicamente su nombre popular, «fruto de la primera referencia conceptual de una época en la que la población carecía en gran medida de conocimientos históricos y artísticos».
La fuente de 'La Muñeca' permaneció activa alrededor de un siglo, hasta que fue desmantelada en los años 60. El motivo de esta retirada pudo deberse a que se trataba de una fuente «obsoleta» y dañada, ya que se trataba de un espacio de mucho tránsito. El lugar donde se ubicaba esta fuente es actualmente la intersección de las calles Independencia y Lealtad, y no existe ningún tipo de referencia a esta infraestructura. «Pese a la apuesta de los inversores, esta zona no se urbanizó tan rápido, durante muchas décadas continuaron siendo solares vacíos en los que se celebraba la feria. No acabó de cuajar hasta principios del siglo XX», explica el investigador.
Una vez retirada de su emplazamiento, la figura fue rescatada por Francisco Infante, un vecino que guardó la pieza durante décadas en el corral de su casa, en la calle de San Pedro. Por aquel entonces, en los años 60, a 'La Muñeca' le faltaba un brazo, debido al paso del tiempo y a su transitada ubicación.
Fue en 2007 cuando este vecino de Pizarra decidió donar la pieza al Ayuntamiento, «junto a otros tesoros fotográficos y bibliográficos del máximo relieve histórico». La entrega se realizó el día 14 de agosto, víspera de la festividad de la Virgen de la Fuensanta.
Posteriormente, la corporación municipal encargó la restauración de 'La Muñeca' a Estrella Arcos Von Haartman, una profesional muy reconocida en la provincia y responsable de la mejora de la talla de la Virgen de Flores de Álora y la Virgen de la Fuensanta de Pizarra, entre otros trabajos. La pieza fue restaurada aunque no se le añadió un nuevo brazo, por lo que a día de hoy su estructura es la misma que presentaba cuando fue retirada de la fuente.
El viernes 9 de julio de 2010, 'La Muñeca' volvió a las calles de Pizarra, esta vez a la plaza de la Cultura, donde permanece hoy día sobre una peana marmórea frente a las puertas del Ayuntamiento.
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