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Los padres de Lucía Vivar, la pequeña hallada muerta el pasado 27 de julio en las vías del tren siete horas después de su desaparición en la estación de Pizarra, se han reunido esta mañana con la jueza que instruye el caso sobre ... el fallecimiento de la niña. Al finalizar el encuentro, su madre, Almudena Hidalgo, ha asegurado estar «disgustada» porque no le gustaría que el caso sobre su hija se archivara.
Pese a que la decisión aún no está tomada, Almudena ha indicado que la magistrada le ha asegurado que todo apunta a que el caso quedará archivado. Y es que, en los últimos días, tal y como ha adelantado este periódico, tras una providencia de la jueza denegando las últimas pruebas solicitadas por la familia, la Fiscalía le ha remitido un escrito pidiendo el archivo provisional de la causa.
La respuesta de la jueza no se hará esperar. Al respecto, desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han informado de que la magistrada tomará una decisión sobre este caso en los próximos días.
De ser archivado, sería de forma provisional. «Quedaría a la espera de que pudieran aparecer nuevos indicios o pruebas y, si se da este supuesto, se reabriría», ha apuntado Almudena.
En cuanto a las razones del por qué se denegaron las pruebas solicitadas por la familia y a que todo apunta a que se podría archivar el caso, la madre de Lucía ha indicado que la magistrada alude a que no existen indicios que apunten a que terceras personas estuvieran involucradas en la desaparición y posterior fallecimiento de la menor.
Pese a ello, Almudena ha insistido en que lo único que pretende la familia es que se conozca «toda la verdad» en este caso. Y para ello, ha asegurado que es necesario que se practiquen más pruebas para descartar la presencia de terceras personas en este caso. «Solo pedimos que se realicen todas las pruebas posibles», ha aseverado.
Se ha referido a la triangulación de teléfonos móviles, una prueba que viene solicitando la familia desde hace tiempo. Almudena ha señalado que, si finalmente se archiva la causa, espera que aparezcan pronto nuevos indicios para reabrirla, ya que los datos del posicionamiento de los terminales desaparecen al cabo de un año.
«La jueza nos ha dado una explicación razonable de por qué no se realiza», ha añadido Almudena, a la vez que ha manifestado que la magistrada les ha comentado que, al no existir indicios de la participación de terceras personas, sería practicar una prueba en balde.
Aun así, ha precisado que la jueza les ha transmitido que la familia está en todo su derecho a recurrir las decisiones que estimen oportunas, así como a acudir a otras vías judiciales, como la civil.
Finalmente, Almudena, que ha estado en todo momento acompañada por el padre de Lucía, Antonio Vivar; ha criticado la investigación que se ha llevado a cabo. Así, ha considerado que «se podría haber hecho mucho más».
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