Las lluvias vuelven a causar estragos en el interior de la provincia de Málaga, afectando con violencia a municipios que ya sufrieron en el pasado. Uno de los más damnificados es Almogía, donde en apenas tres horas, desde las tres hasta las seis de la madrugada, se han registrado graves problemas tanto en el núcleo urbano como en sus pedanías. Durante ese intervalo, las precipitaciones fueron incesantes, provocando la angustia de los vecinos y de la alcaldesa, Toñi García: «Ha sido una manta de agua constante», relataba la edil a SUR.
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Entre las zonas más afectadas se encuentra la calle Pablo Ruiz Picasso, que ya sufrió importantes daños en noviembre. Sin embargo, García califica este episodio como «peor que la DANA» de hace unos meses. La gravedad de la situación ha requerido la intervención de los bomberos, la Guardia Civil y los servicios de emergencia, que llevan horas trabajando en la zona para achicar el agua de las viviendas. «Todos los bajos de las casas se han visto afectados», explicaba la alcaldesa del municipio, perteneciente al Valle del Guadalhorce.
No solo el casco urbano ha sufrido las consecuencias de la borrasca Laurence. La pedanía de Los Moras también ha vuelto a registrar problemas debido a las lluvias. Esta zona ya enfrentó un final de 2024 y un inicio de 2025 complicado, primero con las intensas precipitaciones de noviembre, luego con problemas de aislamiento respecto al resto del municipio y ahora con un nuevo tren de borrascas que ha vuelto a golpear la zona. «Por suerte, podemos decir que no están incomunicados del todo, pero tienen bastantes problemas», aclaró Toñi García.
Otro de los principales retos que enfrenta el Ayuntamiento es la afectación en la red viaria. Según las últimas actualizaciones, la carretera del arroyo Piedra Horadada (Lochi) sigue cortada al tráfico en su tramo final debido a derrumbes en la calzada. Además, las lluvias han provocado nuevos desprendimientos en la escollera de la Piedra Horadada, lo que demorará aún más la reapertura de la vía.
Asimismo, el tráfico en el Carril de Mirlo está cortado en su tramo final. En contraste, una de las pocas noticias positivas es que la carretera Fresneda-Huertecillas permanece abierta, aunque se recomienda a los conductores extremar la precaución ante posibles obstáculos. El Ayuntamiento también ha solicitado a la ciudadanía que solo utilice la carretera MA-3402 (Puente Hierro) en casos estrictamente necesarios, ya que presenta desprendimientos y la circulación por ella puede resultar peligrosa.
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